Después de muchas declaraciones altisonantes, Países Bajos necesita cumplir su propia profecía en el Mundial, empezando por el primer partido de la fase eliminatoria contra Estados Unidos el sábado.
Se ha hablado mucho -todo desde el campamento neerlandés- del potencial del equipo para llegar hasta el final en el torneo de Qatar, principalmente por parte del veterano entrenador Louis van Gaal, aficionado a la intimidación mental y a las provocaciones.
Sin embargo, a pesar de haber ganado su grupo en la primera fase, no hubo muchas pruebas que respaldaran esa confianza en sus fuerzas, ya que tuvieron dificultades frente a Senegal, Ecuador y los anfitriones qataríes.
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El juego errático de los de Van Gaal dará esperanzas a los estadounidenses, que no serán favoritos en su choque de octavos de final, pero que ya han dado alguna prueba de su potencial con su racha de imbatibilidad en el Grupo B, con sendos empates contra Inglaterra y Gales y una valiente victoria sobre Irán para asegurar la clasificación.
Mientras Estados Unidos se preocupa por el estado físico de su principal estrella, Christian Pulisic —tiene una lesión en la pelvis y está siendo evaluado a diario, según la Federación de Fútbol de Estados Unidos—, el seleccionador Gregg Berhalter dijo que su equipo no tendría complejo de inferioridad en el Estadio Internacional Jalifa el sábado.
"Es una gran oportunidad, pero no es algo a lo que vayamos pensando que es un honor", dijo Berhalter.
"Nos merecemos estar en la posición en la que estamos. Y queremos seguir adelante. No queremos irnos a casa el sábado".
"Y a partir de aquí puede pasar cualquier cosa. Lo único que tenemos que hacer es concentrarnos en jugar este partido. No hay que proyectar hasta dónde puede llegar este equipo", añadió Berhalter, gran conocedor del fútbol neerlandés. El técnico de 49 años jugó en la liga neerlandesa en tres clubes diferentes entre 1996 y 2000.
INDISPENSABLE
Para Países Bajos, la clave será conseguir que Memphis Depay despliegue su potencial al ataque y que Frenkie de Jong tenga más influencia en el centro. Van Gaal ha calificado a ambos como indispensables para la causa neerlandesa, pero aún no lo han demostrado.
Depay dice que ya ha superado su lesión en los isquiotibiales, después de haber hecho dos apariciones como suplente y haber sido titular en su último partido de la fase de grupos.
"Estoy en forma. La fase de eliminatorias no es fácil. Ya hemos pasado la fase de grupos (...). Mucha gente pensaba que sería pan comido, pero siempre es un poco diferente", dijo a los periodistas.
Van Gaal, de 71 años, no quiso subestimar al rival.
"Sé por experiencia que los partidos contra países como Estados Unidos y Australia, a los que nos enfrentamos en el Mundial de Brasil 2014, son siempre muy difíciles", dijo.
El ganador del partido avanzará a un encuentro de cuartos de final contra Argentina o Australia el 9 de diciembre.
(Edición de Hugh Lawson, editado en español por Tomás Cobos)