La Selección Argentina derrotó a Italia 3-0 en Londres y se consagró campeona de la "Finalissima", que otorgó título oficial por la FIFA. Con un Lionel Messi sobresaliente y un gran nivel en todas las líneas, el equipo de Lionel Scaloni venció con un fútbol descomunal a los italianos y estiró su invicto a 32 partidos. Los goles fueron de Ángel Di María, Lautaro Martínez y Paulo Dybala.
En un Estadio Wembley repleto, con más de 40.000 argentinos, la noche terminó en una fiesta para el conjunto "albiceleste". La expectativa por ver cómo el seleccionado rendía ante un rival europeo no dejó ninguna duda ante el nivel demostrado. Ya desde el inicio, el "Azzurro" mostró mucho respeto con Argentina y salió a esperarlo en mitad de cancha. Cuando el encuentro era luchado en mitad de cancha y se repartían la posesión, apareció la jerarquía de los jugadores argentinos. Lautaro Martínez se encontró una pelota en mitad, se la dejó a Messi que, con un rodeo, enredó a Di Lorenzo, avanzó hasta ingresar al área por sector izquierdo y habilitó a Martínez que solo tuvo que empujarla con el pie derecho y marcar el 1-0 a los 27 minutos.
Italia quiso manejar la pelota tras ponerse en desventaja pero no creo situaciones de mucho peligro. Cuando la primera mitad se acababa, iba a llegar el segundo golpe a través de un golazo argentino. Los europeos fueron a presionar bien adelante y, a los 45 minutos, Emiliano "Dibu" Martínez debió salir en largo. Lautaro bajó la pelota, aguantó de espaldas al defensor Cristian Bonucci, giró, avanzó más de 30 metros y le dio una asistencia precisa a Di María. El "Fideo" quedó mano a mano ante Gianluigi Donnarumma y definió "pinchándola" por encima del portero italiano.
Si el primer tiempo fue de mucha efectivad para el equipo nacional, el segundo fue lo más parecido a un baile. Ante la desesperación de Italia, el seleccionado argentino comenzó a circular la pelota de lado a lado generando muchas situaciones para ampliar el marcador. Con un Messi enchufado y sobresaliente, el conjunto celeste y blanco se lució y terminó perdonándole la vida a su rival, salvo en la última jugada. En los últimos 15 minutos, desde la tribuna de Wembley empezó a escucharse el "ole, ole" de los hinchas argentinos que coparon Londres y, sobre la hora, llegaría el tercero y definitivo con un gran gol de Paulo Dybala, tras una jugada de Messi. Con esta victoria, el entrenador Scaloni superó el récord que tenía Alfio "Coco" Basile y llegó a los 32 victorias sin perder cuando faltan cinco meses para Qatar 2022.