Los medios de comunicación estatales chinos calificaron el miércoles a Moody's de "tendenciosa" por su perspectiva negativa de la calificación de la deuda de la segunda economía mundial, pero algunos analistas afirmaron que la reacción oficial del Gobierno fue más comedida, señal de la propia preocupación de Pekín por el aumento del endeudamiento.
Los portavoces chinos responden a menudo con declaraciones agresivas al escrutinio internacional. Tras los anteriores recortes de perspectivas de Moody's y S&P Global en 2016, el entonces ministro de Finanzas, Lou Jiwei, tachó a las agencias de calificación de "parciales" durante una reunión del G20 en Washington.
Pero en el comunicado oficial de respuesta a la medida de Moody's del martes, el ministerio solo expresó "decepción." El miércoles, un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores afirmó que China es capaz de profundizar en la reforma y afrontar sus retos, y que daba la bienvenida a "todos los amigos" de "todo el mundo" para que invirtieran en su economía.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Alfred Wu, profesor asociado de la Escuela Lee Kwan Yew de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Singapur, afirmó que, si bien la propaganda china seguía teniendo como objetivo mostrar fuerza a un público nacional, el tono más matizado del gobierno iba dirigido a la comunidad internacional.
Wu dijo que esto era una señal de que China asume la preocupación mundial por el debilitamiento de sus perspectivas de crecimiento y "quiere ser vista como creíble y responsable" a la hora de abordar la cuestión.
"El discurso del ascenso de China fue muy fuerte en 2017. La percepción ha cambiado drásticamente", dijo Wu. "El Ministerio de Finanzas lo reconoce, y sabe que tiene que dar una respuesta más profesional que antes".
Aunque mantuvo la calificación soberana de China en A1, Moody's recortó su perspectiva de estable a negativa, citando la creciente deuda local y los problemas del mercado inmobiliario, condiciones que muchos economistas han advertido que están empujando a la economía a décadas de estancamiento similares a las de Japón.
El tabloide nacionalista del Partido Comunista, Global Times, publicó un artículo en el que citaba a economistas que afirmaban que la decisión de Moody's era "tendenciosa y poco profesional, ya que exageraba en exceso o inventaba riesgos y desafíos".
Moody's no respondió inmediatamente a las preguntas sobre las críticas de los medios de comunicación chinos y la reacción oficial.
Con información de Reuters
Cerrar sesión