El mundo futbolístico se paralizó con el comunicado del F.C. Barcelona. El club culé anunció que Lionel Messi, el mejor jugador de su historia, no va a seguir ligado a ellos a pesar de “haber llegado a un acuerdo”. Una historia llamativa.
“No sos vos, no soy yo. Son ellos”, parece decir el texto entero que entregó el Barcelona a través de sus redes sociales. En este caso, para el club catalán, los cañones están apuntados a la dirigencia de “La Liga” española, que no permite que se realice el contrato debido a los límites financieros que allí se sostienen. En criollo: Barcelona genera menos ingresos de los que paga en salarios. Eso hace que el tope salarial tenga un techo y ese techo llega al inconmensurable sueldo de Lionel Messi, entre otros.
Por qué Messi se va del Barcelona
Lejos de una situación cercana a cómo gira la pelota, lo cierto es que detrás de este anuncio hay un tema económico que va más allá de los lazos de Lionel Messi con el Barcelona. Desde hace ya unos meses, con la llegada al poder de Joan Laporta tras una escandalosa salida de Josep María Bartomeu, las relaciones entre el rosarino y el club catalán mejoraron. Esta situación no es similar a la del año pasado en la cual, el propio Messi, se mostró en rebeldía. Muy por el contrario, esta vez, el conjunto catalán ha dado muestras de cariño y respeto. No solo a través de gestos, sino también de hechos: la llegada de Sergio Kun Agüero, amigo entrañable del 10, es uno de ellos.
Lo que está detrás del velo del anuncio de la salida de Messi del Barcelona es una puja de poder. Hace tan solo unos meses, en abril, la posibilidad de una Superliga con Real Madrid, el Barcelona y Juventus (entre otros) era real. El intento de los clubes grandes de Europa por mayor dinero para sus arcas, con un fondo del banco JP. Morgan, llevó a que, por ejemplo haya problemas entre la UEFA, La Liga y los dos clubes más grandes. En el caso que importa en este momento, Javier Tebas, presidente de La Liga española -y promotor de las SAD y asesor de Mauricio Macri durante su presidencia en temas del fútbol- salió al cruce de ambos equipos. “Es una Superliga de Power-Point. Y así como está concebida es imposible”, dijo.
En ese momento, Tebas se puso del lado de los equipos más chicos y de la competición histórica y envió un comunicado en el que “prohibió” competir a todos aquellos equipos grandes que se unan a la Superliga. En este caso, volvió a haber un capítulo más que desemboca, justamente, en esta situación actual. El presidente de La Liga anunció un acuerdo con el fondo de inversión CVC en el cual habrá un desembolso de dinero, pero a cambio de una toma de derechos televisivos de varios años y que tanto Barcelona, como el Real Madrid, piensan que es leonino.
Esta creencia hizo explotar una nueva bomba que estalló al estilo nado sincronizado. Una hora antes de la noticia sobre la salida de Lionel Messi, el Real Madrid de Florentino Pérez, lanzó un texto en el cual se oponía a ese acuerdo por considerar que hay “una perdida patrimonial” debido a que el trato lleva a, según escribieron, “expropiar el 10,95% de los derechos audiovisuales por 50 años”. Tras esa bomba, Barcelona volvió a cruzar y lanzó el segundo misil en el que habla de “obstáculos económico y estructurales” de la normativa de “la Liga” que hacen imposible el acuerdo con Messi.
Toda esta maraña de textos, comunicados y acuerdos terminó en la noticia que hasta el momento es un hecho concreto: Lionel Messi no va a seguir en Barcelona. No es definitivo y empezó una puja de poder para encontrar una excepción. El destino de Messi, entonces, ahora se define en el VAR.