Emanuel Mammana, defensor de River Plate que actualmente no suma minutos en el primer equipo tras una lesión, vivió un mal momento a nivel personal. Si bien no fue en el club "Millonario" o con sus compañeros del plantel que comanda Martín Demichelis, el zaguero no la pasó nada bien y en las redes sociales trascendieron tristes imágenes del hecho. Para colmo, no juega desde hace más de un mes y su regreso se retrasó un tiempo más.
El jugador que fue sparring de la Selección antes del Mundial de Brasil 2014 tiene una escuela de fútbol en Merlo, provincia de Buenos Aires, en donde sufrió un robo y destrozos. A través de la cuenta de Instagram de la institución comunicaron lo sucedido con un sentido mensaje y publicaron imágenes estremecedoras.
"Queridos amigos, queremos compartir con ustedes la triste noticia con la que nos hemos encontrado... NOS HAN ROBADO!!! una vez más. Lo más triste es que, además de hacer destrozos en las instalaciones, se han llevado elementos de nuestra Escuelita de Fútbol. Materiales con los que juegan nuestros pibes, quiénes llegan cargados de ilusiones y de ganas de disfrutar cada entrenamiento. Nos duele muchísimo y sentimos hacer este descargo porque se le dedica mucho trabajo y esfuerzo a éste sueño, por y para los chicos. No vamos a bajar los brazos, por ellos", escribieron en un principio desde la cuenta oficial @Mammana.Fútbolclub.
Por otro lado, dejaron un mensaje directo contra los autores del hecho delictivo: "Por eso, señores 'amigos de lo ajeno' no se metieron sólo con nosotros. SE METIERON CON LOS PIBES, quizás vecinos de su mismo barrio o comunidad, nuestra comunidad. Si por casualidad les llega este mensaje... Les queremos pedir piedad. Por favor dejennos trabajar tranquilos para los chicos y para todos los vecinos de Merlo".
El día que Emanuel Mammana estuvo al borde del suicidio
El defensor manifestó que pensó en tomar una drástica decisión. Su mamá falleció cuando él apenas tenía seis años, mientras que la desaparición física de su papá se dio nueve años después. Y allí, en su plena adolescencia, tuvo en mente terminar con su camino. "Sentí ganas de largar todo después del fallecimiento de mi viejo, ya había perdido a mi mamá... Pensé en dejar el fútbol, incluso en la locura de suicidarme", contó en la mencionada nota.
"Cuando estaba por tirarme me agarraron del cuello de la remera y me tiraron contra la pared. Esa persona me cagó a pedos, no sé quien es pero la verdad que hoy en día le agradezco de corazón porque me salvó la vida. Mis papás no hubiesen querido que pase eso", aseguró. Por último, se mostró contento de estar nuevamente en su casa: "Lo importante es ser feliz y jugar donde soy feliz", concluyó el zaguero fanático del "Millonario".