La llegada de Franco Colapinto a Williams como piloto oficial de Fórmula 1 despertó un renovado interés en Argentina por conocer las diferentes reglas y particularidades de la máxima categoría. Entre los aspectos más llamativos se encuentra el Safety Car o auto de seguridad, un elemento crucial que puede alterar significativamente el desarrollo de una carrera.
Este sistema de seguridad representa uno de los aspectos más interesantes del reglamento actual, ya que su aparición en pista no solo garantiza la seguridad de pilotos y comisarios, sino que también puede modificar completamente las estrategias de carrera.
¿Qué es el Safety Car y cuál es su función?
El Safety Car es un vehículo de alta performance que ingresa a la pista para controlar la velocidad de los monoplazas durante situaciones de riesgo. Su principal objetivo es permitir que los comisarios trabajen de manera segura cuando necesitan retirar autos dañados o escombros de la pista.
Cuando el Safety Car ingresa, todos los pilotos deben alinearse detrás de él y mantener su posición, sin realizar adelantamientos. Esta situación compacta el pelotón y elimina cualquier ventaja que los pilotos hubieran conseguido hasta ese momento. Los pilotos son alertados de la presencia del Safety Car mediante banderas amarillas y pantallas luminosas con las letras "SC". Esta señalización indica que deben reducir inmediatamente su velocidad y prepararse para seguir al auto de seguridad.
La historia del Safety Car en la Fórmula 1 comenzó en 1973, durante el Gran Premio de Canadá, cuando un Porsche 914 amarillo fue utilizado para controlar la carrera debido a las malas condiciones climáticas. Sin embargo, su implementación oficial no llegó hasta 1993.
Desde su introducción oficial, diversos modelos han cumplido esta función. Entre 1993 y 1995, diferentes marcas proporcionaron el auto de seguridad según el circuito, incluyendo modelos emblemáticos como el Lamborghini Countach en Mónaco y el Lamborghini Diablo en Canadá.
En la actualidad, la responsabilidad de proveer el Safety Car se alterna entre Mercedes-Benz y Aston Martin. Durante la temporada 2023, se utilizaron el Mercedes-AMG GT Black Series, con 730 CV y una velocidad máxima de 323 km/h, y el Aston Martin Vantage, que desarrolla 528 CV y alcanza los 312 km/h.
En 2015 se introdujo el Virtual Safety Car como complemento al sistema tradicional. Este sistema no requiere un vehículo físico en pista, sino que establece un tiempo delta que los pilotos deben respetar, reduciendo la velocidad aproximadamente un 30-40% respecto al ritmo normal de carrera.
El VSC se implementó tras el trágico accidente de Jules Bianchi en el Gran Premio de Japón 2014. Su principal ventaja es que mantiene las diferencias entre los pilotos sin necesidad de reagrupar el pelotón, resultando menos disruptivo para el desarrollo de la carrera.
Las reglas actuales del Safety Car
Las normas que regulan el Safety Car se modificaron significativamente tras la polémica del Gran Premio de Abu Dhabi 2021. La nueva reglamentación establece que todos los autos que se encuentren una vuelta abajo deben recuperar su vuelta antes de que se reinicie la carrera.
Además, se implementaron regulaciones estrictas sobre el comportamiento de los pilotos durante la reanudación. Está prohibido realizar maniobras bruscas de aceleración o frenado que puedan poner en riesgo a otros competidores o afectar la reanudación de la carrera.
La dirección de carrera determina cuándo es seguro retirar el Safety Car. Una vez que se toma esta decisión, el auto de seguridad ingresa a boxes al final de la vuelta y la carrera se reanuda al comenzar la siguiente, con los pilotos pudiendo acelerar nuevamente a partir de la línea de meta.