La cita en el Gran Premio de Las Vegas quedará guardada en la historia de la Fórmula 1 como el escenario en el que Max Verstappen logró su cuarto título en la competencia. Al mismo tiempo, se convirtió en el quinto en ganar cuatro campeonatos al hilo, algo que sólo habían logrado Juan Manuel Fangio (1954-1957), Michael Schumacher (2000-2003), Sebastian Vettel (2010-2013) y Lewis Hamilton (2017-2020).
El piloto neerlandés había ganado su primer título en aquella impresionante definición contra Hamilton en el GP de Abu Dhabi 2021, obtuvo el segundo en Suzuka al año siguiente y el tercero en la sprint de Qatar de la temporada pasada. De hecho, el dominio de Verstappen fue casi absoluto en 2023, con 19 victorias en 22 carreras, y el inicio del campeonato de este año parecía que iba a seguir una lógica similar con sus triunfos en Baréin y Arabia Saudita en las dos primeras fechas.
A esas victorias le había seguido un abandono en Australia por los problemas en los frenos del RB20, pero el coche de Red Bull se mantenía fuerte y el campeón defensor volvió a ganar en Japón y China, tuvo podio en Miami y nuevamente triunfó en Imola. Tras el sexto lugar en Mónaco, se quedó con los GP de Canadá y España, por lo que llegó a la décima fecha con siete carreras ganadas.
Parecía ser que iba a ser otro campeonato que iba a definirse rápido en la Fórmula 1, pero Red Bull comenzó a tener problemas justo en el Gran Premio de su propia casa, en Austria, y el RB20 perdió eficacia poco a poco. Para ese entonces, Lando Norris ya tenía una victoria y estaba a 81 puntos de Verstappen, una distancia que comenzó a disminuir con el paso de las fechas y puso en alerta a Red Bull.
El coche de McLaren había evolucionado de manera notable, tanto que los británicos se pusieron primeros en la tabla de constructores y Norris llegó a ponerse a 47 unidades del neerlandés. Sin embargo, el punto cúlmine del campeonato se dio con el GP de Brasil, en el que Max se hizo con la victoria tras salir del decimoséptimo lugar y volvió a ganar luego de diez carreras, mientras que el británico, que salía con la pole, terminó en el sexto puesto.
Gracias a ese triunfo, Verstappen quedó a una carrera de alcanzar su cuarta corona en la F1, algo que logró hacer en la madrugada de este domingo. La única tarea que tenía el de Red Bull para consagrarse era terminar por delante del inglés, algo con lo que cumplió, dado que “SuperMax” finalizó en el quinto lugar y Norris quedó sexto, por lo que la diferencia en la tabla entre ambos quedó en 63 puntos cuando solamente quedan 60 en juego con las citas restantes en Qatar y Abu Dhabi.
El reconocimiento de Norris a Verstappen
Es sabida la amistad que existe entre ambos, aunque la disputa por el campeonato había dejado ciertas asperezas. Sin embargo, ahora que el campeonato está matemáticamente liquidado y el neerlandés celebró su cuarto título en la máxima categoría, el británico ha reconocido la superioridad de su amigo.
Tras la celebración del podio que fue protagonizado por George Russell, Lewis Hamilton y Carlos Sainz, Norris se presentó en la zona mixta para dar las declaraciones a la prensa. Fue ahí cuando el piloto de McLaren se refirió a la temporada que tuvo Verstappen y a su rivalidad: “Max se merecía ganar, hizo una temporada mejor que yo. Se lo merecía más que nadie, Max no tiene debilidades. Cuando tiene el mejor coche domina y cuando no lo tiene sigue ahí, siempre”.
Cerrar sesión