Diego Armando Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020. Sin embargo, su recuerdo estará por siempre grabado en la memoria de millones de personas del mundo. El mejor futbolista de todos los tiempos ha tenido cientos de momentos verdaderamente inolvidables y conocidos por muchísima gente. De todas formas, hay muchas historias que todavía quedan por dar a conocer. Una de ellas fue revelada por el periodista Cherquis Bialo, que en carne propia vio cómo Pelusa le cumplió un sueño a su padre 'Don Diego'.
El momento en cuestión tiene fecha exacta: el miércoles 16 de septiembre de 1981, cuando todavía vestía la camiseta de Boca, Maradona viajó a Las Vegas (Estados Unidos) junto a su padre, su representante Jorge Cyterszpiler y un amigo. ¿El objetivo de la aventura? Ver la pelea de boxeo entre Sugar Ray Leonard y Tommy Hearns.
Don Diego era fanático de las peleas de boxeo. De hecho, cuando vivía en Villa Fiorito, las escuchaba a través de la radio y se emocionaba con los combates de la época. El genio del fútbol mundial heredó dicha pasión y por eso también se entusiasmó con la idea de llevar a su papá a la pelea de los dos grandes púgiles estadounidenses. Las entradas las consiguió por medio de una persona vinculada al Barcelona, equipo que para ese entonces ya tenía intenciones de contratarlo.
Con el objetivo de alentar a Sugar Ray Leonard, y de acuerdo a lo que relató Cherquis Bialo en Infobae, Maradona y su padre se dirigieron a la tercera fila del Caesar’s Palace, donde 24.162 espectadores disfrutaron de una gran pelea. Entre ellos, se destacaron reconocidas figuras del deporte, la música y el espectáculo como Muhammad Alí, Paul Anka, John Mc Enroe, Vitas Gerulaitis, Dean Martin, Burt Reynolds, Donna Summer, Marvin Hagler, Jack Nicholson y Liza Minelli.
Según comentó el periodista, quien vivió aquel momento en carne propia, Maradona apoyaba a Ray Leonard y exclamaba: "Vamos Sugar que lo tenés, vamos firme ahí con las dos manos…". Incluso, y con una sonrisa en la cara, le confesó: "Mirale la cara a mi viejo y vas a saber si estoy contento. Mirale la cara a mi viejo, le cumplí un sueño de cuando él escuchaba boxeo por radio en Fiorito. Mirá dónde estamos… Nos dimos un abrazo y se fue".