Después de haber quedado eliminado en la Copa Libertadores tras caer en los octavos de final por 2-0 en el partido de vuelta ante Fluminense, uno de los jugadores del conjunto de La Paternal explotó contra el árbitro y, además, se quejó de lo que había pasado dentro del campo de juego.
La caída de Argentinos Juniros fue ante Fluminense que metió oles en el final del encuentro disputado en el estadio Maracaná. Los autores de los tantos fueron Samuel Xavier y John Kennedy. Después de la derrota, uno de los jugadores se quejó completamente sacado de lo que había pasado con el árbitro que, entre otras cosas, no cobró una durísima falta contra un jugador de argentinos que terminó con un terrible golpe en la cabeza.
En medio del partido se llevó adelante una dura gresca entre los jugadores porque hubo una pelea entre los dos planteles. Allí fue que el árbitro Alexis Valenzuela agregara 10 minutos por pelea entre los dos planteles, donde echó al director técnico Milito, el equipo argentino quedó desguarnecido y, con un pelotazo largo, Jhon Kennedy se fue solo ante la marca de Marco Di Cesare, enganchó para adentro y definió sutilmente al segundo palo para anotar el 2-0.
Problemas con los hinchas y la policía
Temprano el día lunes, los hinchas de Fluminense realizaron una cacería cuando parte de la torcida del equipo brasileño emboscó a un grupo de hinchas del club de la Paternal y les robo sus pertenencias, entre ellas, una camiseta del "Bicho". En el mediodía del martes continuó la violencia por parte de la hinchada del Fluminense que cercaron a un hincha de Argentinos Juniors para golpearlo salvajemente hasta la aparición de barrabrava del equipo argentino que tomó represalias y defendió al simpatizante del ataque. Por este incidente, hay varios argentinos detenidos tras dejar varios cariocas heridos.