La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) informó el martes que reanudará el Campeonato Brasileño a principios de junio tras verse obligada a suspender los partidos la semana pasada debido a las históricas inundaciones en el estado de Rio Grande do Sul.
Los equipos del estado más meridional de Brasil no pudieron jugar después de que las fuertes lluvias azotaron la zona desde finales de abril, y los aguaceros causaron la muerte de más de 160 personas. Cerca de 100 residentes siguen desaparecidos y más de 500.000 han sido desplazados.
Los partidos de los tres equipos de Rio Grande do Sul ya se habían suspendido hasta el 27 de mayo debido a los daños causados por las inundaciones, incluidos los de estadios, centros de entrenamiento y aeropuertos. Después se aplazaron la séptima y octava jornadas del campeonato, y la CBF consultó a los 20 clubes del Brasileirão.
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Ahora, la competición se reanudará el 1 de junio, incluyendo a los equipos de Rio Grande do Sul.
El Gremio se enfrentará al Bragantino en Curitiba, en el estado de Paraná, ya que su estadio de Porto Alegre resultó dañado por las inundaciones. Internacional y Juventude jugarán fuera de casa en la séptima jornada.
En la octava ronda, el Internacional jugará en Criciuma, a las afueras de Porto Alegre, mientras que el Juventude lo hará en Caxias do Sul, estado en el que es local.
La próxima semana se celebrará una reunión del consejo técnico de la primera división brasileña para discutir los últimos detalles del campeonato.
Con información de Reuters
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