El final de la temporada de Red Bull es pura incertidumbre, desde la posibilidad de que Max Verstappen pierda el campeonato del mundo ante Lando Norris hasta las dudas sobre la conformación de sus dos equipos para la siguiente edición del campeonato de Fórmula 1. Al retiro de Daniel Ricciardo tras el GP de Singapur, le siguió la llegada de Liam Lawson, quien se perfila como el reemplazante de Checo Pérez para 2025.
Si bien el piloto mexicano tiene contrato hasta 2026 con la marca de las bebidas energéticas, lo cierto es que su falta de rendimiento no agrada en la sede de Milton Keynes, donde esperan al final de la temporada para confirmar la dupla del 2025. En este contexto se dio el Gran Premio de México este fin de semana y Checo Pérez ni siquiera pudo superar la Q1 en la clasificación, por lo que salió del decimoctavo lugar en la grilla de partida.
A pesar de ello, el tapatío había mostrado tener un buen ritmo en las primeras vueltas, a tal punto de que ya estaba en zona de puntos en la vuelta 18, momento en el cual su carrera comenzó a decaer. El culpable de esto fue Liam Lawson, que rebasó al mexicano con una cuestionable maniobra que empujó al RB20 fuera de la pista, lo que produjo daños en el pontón y el suelo del coche de Checo Pérez, motivo por el que comenzó a perder rendimiento en pista.
Ni bien superado por el piloto de Racing Bulls, Checo Pérez dijo en la radio: “¿Qué diablos está haciendo este idiota? ¿Está bien?”. Sin embargo, ese no fue el único cruce que tuvieron los hombres de Red Bull, quienes se reencontraron en la recta principal durante las vueltas finales, ya con ambos sin posibilidades de sumar puntos en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
En ese momento, el oceánico volvió a pasar al mexicano, aunque no sin antes dedicarle un gesto con el dedo medio que fue advertido por las cámaras. También es cierto que Checo Pérez había vuelto a referirse a Liam Lawson unos minutos antes, cuando desde Red Bull le advirtieron la presencia de escombros en la curva 12 y respondió: “Me imagino que es el mismo idiota el que ha chocado otra vez”.
La imagen de Lawson decae la Fórmula 1
La rivalidad interna es algo que siempre existió en la Fórmula 1 y que suele ser bien vista, siempre y cuando no afecte a los resultados del equipo. En el caso de Red Bull, el tema es un poco más delicado, dado que la marca tiene dos escuderías: Red Bull y Racing Bulls, también llamada simplemente RB. De ahí que lo sucedido este domingo en el Gran Premio de México pueda convertirse en un problema grave para las aspiraciones de Liam Lawson.
Lejos de competir por el asiento de Checo Pérez para 2025, lo que ha hecho el neozelandés terminó por dilapidar a la escudería austriaca, que sumó solo con Max Verstappen en el sexto lugar y perdió el segundo puesto en el campeonato de constructores. El triunfo de Carlos Sainz y el tercer lugar de Charles Leclerc le dieron a Ferrari los puntos necesarios para superar a Red Bull, que ahora está tercero a 25 puntos de la Scuderia.
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