El ex entrenador de Estudiantes de La Plata y la selección argentina, Alejandro Sabella, se encuentra transitando horas difíciles: su estado de salud empeoró y ya no puede respirar por sus propios medios. Según pudo averiguar El Destape, Pachorra fue entubado y le han colocado un respirador artificial que lo mantiene estable.
Habiendo ingresado en un sanatorio porteño el pasado 26 de noviembre, producto de una arritmia cardíaca, Sabella pudo reponerse de este infortunio generado por la terrible noticia del fallecimiento de Diego Maradona. Sin embargo, el ex entrenador Pincha contrajo un virus intrahospitalario que empeoró el panorama y por el que padeció altos cuadros febriles y complicaciones clínicas.
Una vez más, luego de transitar otro sinuoso camino, Sabella estaba a punto de obtener el alta para regresar a su hogar. Sin embargo, uno de los entrenadores más reconocidos de la historia argentina sufrió un nuevo infortunio: su salud desmejoró notablemente este martes 8 de diciembre y ahora necesita asistencia mecánica para poder respirar.
De este modo, tras haber superado diferentes obstáculos y hasta haber salido de una terapia intensiva en donde fue inducido a un coma farmacológico, Sabella debe darle batalla a otro escenario inesperado. A sus 66 años, los fanáticos de Estudiantes de La Plata, la selección argentina y todo el fútbol argentino están a la espera de la mejoría de este gran profesional que supo ganarse el cariño del pueblo albiceleste.
Mascherano le envió toda su fuerza a Alejandro Sabella
Pasadas las 14:30 horas de este martes, fue el propio Javier Mascherano quien se pronunció sobre la salud de Alejandro Sabella. Mediante su cuenta oficial de Twitter, el Jefecito escribió "Fuerza, Ale". Adjuntando un corazón, quien culminó su carrera como futbolista profesional (justamente) en Estudiantes de La Plata, le demostró su cariño al entrenador con el que logró llegar a la final de la Copa del Mundo 2014.
En dicho encuentro, Argentina cayó ante Alemania por 1 a 0 en tiempo suplementario. Más allá del trago amargo y de la tristeza que generó el no haber podido obtener el máximo logro del fútbol mundial, el plantel de Sabella regresó al país para ser condecorado por Cristina Fernández de Kirchner y todo el pueblo argentino.
Con el paso de los años, y tras ser distinguido en el salón de los Pasos Perdidos del Congreso de la Nación, Sabella rompió en llanto al recordar esa fatídica definición: "Me duele en el alma... no haber podido traer la Copa para nosotros, para Argentina. A pesar de ser segundos, es una caricia al alma, me reconforta el espíritu, quiero agradecerle a cada uno de los jugadores desde el primero hasta el último que dejaron sentados los valores que nosotros quisimos esparcir a lo largo de estos tres años de campaña".