Murió Omar Moreno Palacios, uno de los exponentes de la música folcórica

El artista falleció a los 82 años y la noticia fue confirmada por su hija a través de redes sociales.

17 de febrero, 2021 | 17.10

Uno de los máximos referentes de la canción folclórica, Omar Moreno Palacios, murió a los 82 años luego de estar varios meses internados por encefalitis. La noticia fue confirmada por su hija a través de redes sociales. 

Nacido en Chascomús, "El Gaucho", como era llamado, tuvo un temprano debut en la música cuando pisó, por primera vez, un escenario a los ocho años. Luego, ya cerca de los 18, se radicó en Uruguay. Retornó al país en la década del 60 donde tuvo una notable carrera con figuras como Los Chalchaleros, los Hermanos Ábalos, Raúl Barboza y Julia Elena Dávalos. Sus obras más reconocidas entre las que destacan "La paloma indiana", "Huella sin huella", "Provincia de Buenos Aires", "Te dije la verdad", "Trovador surero" y "Buen rumbo", entre tantas otras. 

El artista también encontró en la radio el gran sitio para difundir la música tradicional en diversos ciclos y, en la década del `90, comenzó a participar con asiduidad de distintos festivales europeos, en donde llamó la atención su particular estilo.  Por otro lado,  tuvo legendarios ciclos de radio, como por ejemplo, "La Posta". 

Su larga trayectoria incluye la creación de clásicos como "Sencillito y de alpargatas", aclamada en festivales europeos y considerada una especie de himno del folclore característico del sur bonaerense.  La música surera, entre otras cosas, tiene las principales raíces en la región pampeana y, por ejemplo, tiene valor y peso en las payadas, los malambos y la huella. 

La hija escribió en redes sociales: "No puedo elegir bien las palabras en este momento. Hablo, escribo y todavía no lo creo". El velorio se llevará a cabo entre las 13 y las 15 de hoy, en Cerrito 1.990, en la localidad bonaerense de Temperley. Por otro lado, aseguró: "él no quería nada. Ni despidos, ni llantos, ni que lo estén mirando, solo quería estar escuchando milongas" y añadió que "todo aquel que quiera y pueda pasar a lo que quiera, despedirse, llorar, hablar, pasar o tocarse un tema, será bienvenido".