Dave Grohl hizo una impactante revelación a través de su cuenta de Instagram y causó revuelo en las redes sociales. El cantante de Foo Fighters admitió haber engañado a su esposa, Jordyn Blum, y anunció que recientemente tuvo un hijo extramatrimonial.
"Me he convertido recientemente en el padre de una pequeña niña, nacida fuera de mi matrimonio. Planeo ser un padre amoroso y de apoyo para ella. Amo a mi mujer y mis hijas, y estoy haciendo todo lo posible por recobrar su confianza y ganarme su perdón", indicó la estrella de rock y exintegrante de Nirvana. "Agradecemos su consideración hacia todas las niñas involucradas, mientras avanzamos juntos", agregó Grohl en el posteo de Instagram que tiene los comentarios cerrados.
La noticia no tardó en dar la vuelta al mundo, generando fuertes críticas hacia el músico multiinstrumentista. Sin embargo, Dave Grohl pidió consideración y comprensión hacia todos los niños involucrados en esta situación, esperando un gesto de responsabilidad y empatía con la prensa.
Jordyn Blum y Dave Grohl mantienen una relación desde hace más de 20 años y tienen tres hijas juntos: Violet Maye Grohl, Harper Willow Grohl y Ophelia Saint Grohl. Pese a las intenciones del cantante por recomponer la relación con su esposa, habrá que ver que sucede con el matrimonio. A pesar del duro golpe que representa esta confesión, la pareja deberá encontrar la forma de lidiar con esta situación y decidir qué camino tomar de ahora en adelante.
Llegó School of Rock a la Argentina: de qué trata y cómo funciona
La reconocida franquicia internacional School of Rock, dedicada a la música, llegó a Argentina e inauguró su primera sede musical en Nordelta. Con más de 280 sucursales en Estados Unidos y 74 en otros países como México, Chile, Bolivia, Perú, Irlanda y Portugal, la escuela llegó al país bajo la dirección de Roberto Sambrizzi, CEO de School of Rock Argentina.
School of Rock se distingue por su metodología educativa única, diseñada para transformar a un alumno sin experiencia previa en un músico capaz de interpretar canciones junto a una banda. Este enfoque, basado en la “ingeniería inversa” y patentado por el creador de la franquicia, se centra en la práctica antes que en la teoría.
Una escuela distinta
Roberto Sambrizzi, CEO de School of Rock Argentina, explica: "Fomentamos el aprendizaje a través de la participación en shows en vivo. Los estudiantes pueden elegir aprender a tocar bajo, guitarra, teclado, batería o desarrollar sus habilidades vocales, integrándose en grupos según su edad y nivel."
Las clases están organizadas en categorías específicas para cada grupo etario: los más pequeños, de 4 a 5 años, forman parte de la sección “Little Wings”; los niños de 6 a 7 años son conocidos como “Rookies”; “Rock 101” está destinado a jóvenes de 8 a 12 años, y el nivel “Performance” está dirigido a adolescentes de 12 a 17 años. Además, la escuela ofrece clases individuales y grupales para adultos que desean cumplir su sueño de convertirse en "rockeros".
Con una firme apuesta por el país, la franquicia planea abrir su segunda sede en Pilar en marzo de 2025, con la ambición de expandirse por toda la República Argentina. "Argentina, como cuna del rock en América Latina, era el lugar ideal para traer nuestra propuesta", afirma Sambrizzi. "La pasión por la música y la cultura rockera está profundamente arraigada en el ADN argentino, por lo que nos emociona ser parte de esta comunidad".
School of Rock llegó a Argentina con el objetivo de ofrecer experiencias musicales únicas a todos sus alumnos. Con un enfoque divertido y dinámico, promete resultados significativos en poco tiempo, posicionándose como un nuevo referente en la enseñanza musical del país.
School of Rock, una película inspiradora
School of Rock es una de las comedias más conocidas de los últimos años. Inspirada en esta escuela, la película sigue la historia de Dewey Finn, un músico fracasado que, por necesidad, se hace pasar por maestro sustituto en una prestigiosa escuela privada. Al darse cuenta del talento musical de sus alumnos, Dewey decide formar una banda de rock con ellos, enseñándoles todo lo que sabe sobre música y vida.
Lo más divertido de la película es ver cómo Dewey transforma a un grupo de estudiantes tímidos y obedientes en verdaderos rockeros. A través de la música, los chicos aprenden a ser más seguros de sí mismos, a expresarse y a trabajar en equipo.