Cindy Cats llevó adelante un explosivo show en el Estadio Obras en la noche del lunes 9 de diciembre y dio por finalizado un 2024 cargado de emociones. La banda está conformada por Pedro Pasquale en guitarra; Francisco Alduncín en batería; Julián Gallo en el bajo; Axel Introini en teclados; Felipe Herrera en voz; y los percusionistas Carlos Salas y Gonzalo Miranda, y el evento tuvo la particularidad de que fueron fieles a su enfoque musical desde el funk y el soul, pero hubo una clara reivindicación al rock nacional, el folklore y las raíces argentinas con invitados estrella.
Con su tradicional formato de escenario 360, el evento de Cindy Cats arrancó a las 21.30 de un lunes, un día atípico para la realización de shows en Buenos Aires, pero con un Obras agotado. Al principio, comenzaron con una introducción instrumental que vienen haciéndola en los últimos recitales donde se pudo percibir una reminiscencia al sonido de Snarky Puppy, la reconocida banda de jazz fusión estadounidense. Pegadito a la intro, empezó la versión de Sábado de Divididos. Cuando el cantante Felipe Herrera gritó "¡no eran más de seis!", la primera frase del tema, el público lanzó un murmullo que denotó una sensación de sorpresa, ya que no se lo esperaban.
Luego comenzó la catarata de invitados, algo que es característico de la jam de Cindy Cats. Producto de sus trabajos con artistas mainstream, tienen la posibilidad de codearse con estrellas de la música y la primera invitada fue la artista Lara 91k para intepretar Nada mejor, quien tomó la decisión de utilizar autotune en el micrófono. Después hicieron la "Rosalía .AR": con una pista de fondo, reproducen un medley de temas de la cantante española mientras tocan arriba de la misma con una "destrucción" -en el buen sentido" de las canciones originales. Lo mismo hacen con Bad Bunny, pero en este caso -y a pesar de haber estado en su lista- no lo ejecutaron.
El show tuvo una clara reivindicación del rock nacional y el folklore argentino no solo por los invitados, sino también por los cálidos comentarios de Felipe Herrera, quien celebraba la rica historia musical nacional. De hecho, hicieron el famoso tema Carnavalito del duende de Cuchi Leguizamón. Llegó el turno de Alambre González, el guitarrista de rock-blues de 68 años que supo tocar con Pappo e integrar la banda MAM con Ricardo Mollo, Diego Arnedo y Omar Mollo. El experimentado artista se subió a tocar Abismo de Illya Kuryaki y El Viejo de Pappo con jeites de blues muy marcados, pero con cierta incomodidad, ya que se vio que tuvo algunos problemas técnicos a pesar de la buena presentación.
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Otro de los momentos del show fue cuando invitaron a la Bersuit: Daniel Suárez y El Cóndor cantaron Vuelos al estilo Cindy Cats, con un notable cambio en el enfoque de la canción. Al terminar, la gente comenzó a corear la melodía de Señor Cobranza, pero no la tocaron. Sin dudas uno de los momentos furor fue cuando se subió Cazzu, una de las impulsoras del trap en Argentina que volvió a los escenarios hace pocos días en el Buenos Aires Trap después de un tiempo alejada. La artista cantó su tema Nena trampa y Paisaje, de Gilda. Y llegó el turno de Trueno para desatar una ola de reacciones, el rapero cantó su canción Argentina y luego comenzó una "open jam" de freestylers: jóvenes del ambiente se subieron para tirarse barras entre ellos mientras los integrantes originales de Cindy Cats se bajaban para darle lugar a otros músicos, dando así toda la escencia de una verdadera jam en pleno vivo.
Nahuel Pennisi fue otro de los invitados sorpresa que hizo vibrar a todo Obras. Se subió con su guitarra criolla y entre su estilo folklórico y el funk-soul de Cindy Cats, interpretó Yo vengo a ofrecer mi corazón de Fito Páez. "Hoy es una noche histórica para mí, tocar con estos monstruos...", expresó. Para seguir reivindicando al rock nacional, Hilda Lizarazu en voz y Lito Vitale con su piano se subieron y a dúo interpretaron Cinema Verité de Charly García. Unos minutos atrás, la banda había ejecutado Alma de diamante del Flaco Spinetta con un coro gospel.
En la recta final del show, Juan Carlos Baglietto cantó Nada ,perteneciente a su disco La despedida lanzado en 2003, y para ponerle una pizca de rock and roll, Juanse hizo poguear a varios del público tras tocar Rock del gato y Para siempre de Ratones Paranoicos, generando una euforia en todo Obras. Para terminar con el espectáculo, Cindy Cats cerró con Circo Beat de Fito Páez y se despidió a puro aplauso. A diferencia de recitales anteriores, no se vio una ejecución tan disruptiva en términos musicales por parte del grupo, que tiene una espíritu funk, soul y jazzero, sino que le dieron más relevancia a la canción en sí y al invitado/a en cuestión. De esta manera, cerraron un 2024 cargado de emociones, ya que su primera presentación en vivo fue en mayo de 2023 en la cervecería Temple de Palermo. Ahora despidieron el año y comenzarán el 2025 habiendo hecho historia: llenar un Obras.