El galán veterano del cine Alain Delon pidió la eutanasia para morir en paz, luego de los contratiempos que sufrió su salud tras el doble ACV que tuvo en 2019. Habiendo formalizado el pedido, el fármaco que le permitiría irse -y el que se usa en los estados en los que está autorizada esta práctica- es el Pentobarbital sódico. ¿Cómo funciona este sedante?
El Pentobarbital sódico es un sedante potente, de la familia de los barbitúricos, que actúa sobre el sistema nervioso y provoca la muerte en pocos segundos. Según precisiones del sitio R7 quien lo ingiera para morir deberá hacerlo con una dosis letal de 15 gr, mezclada con una bebida que puede ser agua o jugo.
Cabe señalar que este fármaco es el que se utiliza en los Estados en que es legal la pena de muerte. También, se utiliza en aplicaciones veterinarias. Y también es el método permitido en los países en los que la eutanasia es legal, como Suiza.
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Las palabras del hijo de Alain Delon sobre el deseo de su papá
Anthony Delon -hijo de Alain- contó que recientemente inició los preparativos para la muerte de su padre mediante eutanasia. “Sí, es cierto, me pidió eso”, afirmó en diálogo con la radio francesa RTL. Acto seguido procedió a explicar las razones de su padre, que cumplió 86 años en 2021, para llegar a esta decisión: "Empezó a considerar la eutanasia tras la muerte de Nathalie, su esposa, por cáncer de páncreas. Ella decidió morir como vivió. Había elegido optar por la eutanasia".
Nathalie falleció en enero de este año y su familia se encargó de acompañarla durante todo el proceso hasta llegar a la muerte asistida, algo que en Suiza -hogar de la familia Delon- es completamente legal. Años atrás, Alain había manifestado su apoyo a la eutanasia porque le parecía una partida "lógica y natural".
“En un momento dado, la persona tiene derecho a partir en paz, sin pasar por hospitales, inyecciones y demás”, precisó en declaraciones a la televisión francesa. En ese mismo reportaje, Delon habló de las consecuencias del ACV en su cuerpo y sus habilidades motrices: “Envejecer es horrible. No podés hacer nada al respecto. Perdés la cara, perdés la vista. Te levantás un día y, maldita sea, te duele el tobillo”.