Poner el cuerpo para llevar adelante un festival literario no es un decir: en efecto, a la par de la satisfacción de haber concretado seis ediciones, hay en la organización del Festival Internacional de Literatura de Tucumán (FILT) un entramado de adversidades que convierten a la convocatoria, cada año, en un verdadero desafío.
En el centro de esas dificultades se sitúa el factor económico: Ahora que tengo la posibilidad de vivir en Buenos Aires y trabajar allá en el ámbito del libro, puedo decir que las dificultades entre producir un evento o publicar un libro en una provincia tienen que ver meramente con lo económico", indica Sofía de la Vega.
"Las seis ediciones del FILT han demostrado lo exuberante del campo literario tucumano: escritores de todo tipo de género literario, editoriales sólidas con proyección nacional y distintos proyectos vinculados al libro. Escribir en Tucumán o sobre Tucumán es una posibilidad real, original, que para mí no tiene dificultades, al contrario, cierto ritmo tucumano me parece más amable a la hora de producir. Pero el alcance económico y las posibilidades de crecer así como la estabilidad del ámbito cultural siguen estando en Buenos Aires, aunque también vale decir que, pese a todos los obstáculos, el FILT va por su sexta edición, asegura una de las organizadoras.
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Del mismo modo, Blas Rivadeneira considera que el hecho de que el FILT tenga lugar implica una serie problemáticas propias de una provincia. En Tucumán -señala- se necesita una mayor articulación entre los diferentes agentes, si bien se han dado pasos en ese sentido. En el festival intentamos que esos cruces entre escritores, editores, libreros, académicos, críticos y diferentes instituciones públicas suceda, con sus conflictos, pero que suceda. Es muy difícil, pero entendemos que es el camino, evitar las acciones aisladas".
"En términos de financiamiento para el festival esta falta de articulación también es notoria: es muy difícil contar con auspicios privados y públicos. El festival se hace muy a pulmón y creo que hay que dejar de romantizar la gestión cultural a pulmón, que es otra problemática del campo. El FILT cuenta desde su primera edición con el importante apoyo de la Universidad Nacional de Tucumán, que ha colocado al evento como parte del Julio Cultural Universitario, pero el resto de los auspiciantes no lo hacen todos los años o son muy chicos. Creo que se debería avanzar en políticas públicas de fomento de este tipo actividades, de esta calidad y envergadura, una ley del libro provincial. Hay mucho por hacer, plantea el organizador.
El FILT es un espacio que busca consolidar a la provincia como un referente del campo literario nacional, además de dar cuenta de las voces emergentes y reunir figuras de la literatura latinoamericana.
Entre las autoras y autores de este año, estarán presentes Lucrecia Martel, Julieta Laso, Dolores Reyes, Hernán Ronsino, Luciana Tagliapietra, Marina Yuszczuk, Daniel Mella, Alejandro Crotto, Paula Trama, María Lobo, Salustiano Zavalía, Gabriela Bejerman, Ezequiel Radusky, Marta Lopetegui, Grimanesa Lázaro, Florencia Méttola y Ezequiel Svetliza.
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Con información de Télam