Ahora que las temperaturas bajaron un poco, es el momento perfecto para disfrutar del turismo termal en Argentina. El país cuenta con impresionantes complejos que ofrecen aguas termales medicinales y un entorno natural hermoso, especialmente en otoño, cuando los colores del paisaje son espectaculares.
En la Patagonia, encontramos las Termas de Copahue, ubicadas a 19 kilómetros de Caviahue. Estas termas de origen volcánico ofrecen aguas medicinales que contienen minerales beneficiosos para la salud, como azufre y sílice. Después de estar cerradas por un tiempo, volvieron a funcionar de cara a la temporada de verano.
En la provincia de Mendoza, además de su reconocido turismo relacionado con el vino, se encuentran las Termas de Cacheuta. Este escenario natural impresionante cuenta con piletas de piedra volcánica y aguas termales que oscilan entre los 32 y 42 grados. Las aguas provienen del deshielo y emergen al chocar contra la roca granítica de Cacheuta. Además, el lugar cuenta con toboganes y está abierto durante todo el año.
En Santiago del Estero, se encuentran las famosas Termas de Río Hondo, que reciben un flujo constante de turistas durante todo el año. Situadas a orillas del río Dulce, estas termas se consideran el principal centro termal del país debido a sus aguas minerales que van de los 35 a los 45 grados. Además, está considerada como la ciudad-spa más grande del mundo. Para acceder a las aguas termales, es necesario alojarse en los distintos hoteles de la zona.
En la provincia de Buenos Aires, cerca de la Laguna de Epecuén, se encuentra el Parque Termal "Mar de Epecuén". Este complejo cuenta con piletas termales cubiertas y externas climatizadas con agua natural del Lago Epecuén, similares en propiedades a las del Mar Muerto. Además, ofrece servicios de spa, restaurante propio y proveeduría. El acceso es fácil en automóvil a través de diferentes rutas.
Y en Entre Ríos se destaca la ciudad termal de Concepción del Uruguay, que cuenta con un complejo termal compuesto por nueve piletas, sauna, spa y un área de relajación. Las aguas termales surgen de una gran profundidad y tienen una temperatura constante de 42 grados. Es un lugar ideal para el descanso y la relajación.
Escapadas: el destino ideal para los amantes del folklore y los quesos
A solo unos kilómetros de la bulliciosa capital argentina se encuentra un destino único que nos transporta al pasado y nos sumerge en la rica cultura gauchesca. San Antonio de Areco, conocido como la "Capital Nacional de la Tradición", es un lugar maravilloso para escapar de la rutina, adentrarse en la historia, la naturaleza y disfrutar de la ruta del queso.
Este encantador pueblo de la provincia de Buenos Aires cuenta con una gran infraestructura turística que invita a los amantes de la aventura a descubrir su legado histórico y las tradiciones gauchescas. Sus calles, rodeadas de arquitectura colonial, nos transportan a otra época y definen la identidad del lugar como la cuna de la tradición gaucha.
San Antonio de Areco ofreció una amplia variedad de actividades para disfrutar. Uno de los lugares más destacados fue el Museo Gauchesco Ricardo Güiraldes, donde podemos sumergirnos en la historia de la ciudad y conocer más sobre las tradiciones y la cultura gaucha.
Además, la Iglesia Parroquial es otro lugar imperdible que nos permitirá adentrarnos en la cultura y el pasado de este encantador destino. El casco histórico invitó a los turistas a explorar sus calles y sumergirse en su rica historia local.
Para los amantes de la autenticidad, la pulpería La Blanqueada fue una parada obligatoria. Este auténtico almacén de la época ha sido conservado a lo largo de los años y nos permitió viajar en el tiempo y vivir una experiencia única.
Y si te consideras un amante de la buena gastronomía, no pudiste dejar de visitar la Ruta del Queso, donde encontraste una gran variedad de quesos artesanales elaborados por los lugareños. Sin duda, una experiencia deliciosa para saborear el sabor tradicional de la región.