Guido Kaczka se llevó un gran susto en Los 8 Escalones del Millón, programa que conduce en El Trece, luego de ver las caras extrañas que puso una participante después de responder una pregunta que casi la deja fuera de la competencia, como si hubiese estado a punto de sufrir una descompensación en plena grabación.
La joven, llamada Catalina, se enfrentó a un desafío muy difícil: responder una pregunta sobre una histórica serie televisiva que se emitió entre 1990 y 1992, algo muy alejado para las personas de su generación. Aunque salió triunfante y acertó la respuesta, Kaczka se asustó tremendamente al ver las caras que puso luego de responder.
"Catalina, si contestás bien empatás. Sino, te quedás en ese escalón", le advirtió el conductor. La pregunta que le tocó a Catalina fue: "En la comedia Amigos son los Amigos, ¿cuál de estas frases solía decirle el personaje de Carlos Calvo a Pablo Rago para darle seguridad?". La opción A era "Tranca, 420" y la B "Vos fumá". Después de varios segundos pensativa, Catalina optó por la segunda opción.
"Vos fumá", respondió la joven. "¡Sí, correcto!", exclamó Guido. Inmediatamente después, la participante exhaló en un gesto de alivio, cerrando fuerte los ojos y llevándose una mano al pecho como si estuviese a punto de darle algo en el corazón. "Ay, ay, ay. ¿Estás bien, necesitás agua, Catalina?", le preguntó el conductor con un tono de terror en su voz.
Una participante se accidentó en Los 8 Escalones del Millón y Guido Kaczka la tuvo que asistir
Guido Kaczka se llevó otro gran susto algunos episodios atrás, cuando una participante se accidentó en medio del programa. Todo ocurrió cuando la mujer, llamada Alina, se consagró como ganadora del millón de pesos. Fue tanta su emoción que se largó a llorar y se mordió los labios demasiado fuerte, lo cual le ocasionó un gran sangrado.
Al ver su sangre, Kaczka se ocupó de que la producción la asistiera: "¡Ay, Alina! Te mordiste el labio. Ahora te damos manteca de cacao". Sin embargo, la mujer estaba demasiado emocionada como para preocuparse. Alina no paraba de morderse los labios y Guido volvió a insistirle en que dejara de hacerlo. "Te veo y no puedo... ¡Ay, Alina! Te mordés los labios de los nervios... Está emocionadísima. Decidió venir de Mendoza a Buenos Aires a jugar. Con todo lo que implicó para ella llamar y anotarse", explicó el conductor.
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