Este martes se vivió una situación completamente inesperada en Intrusos cuando una vieja integrante del programa volvió a los estudios de América TV. "Me necesitaron", aseguró la panelista en cuestión, que en su momento se fue muy enojada con la forma en la que las autoridades de la señal se manejaron con ella.
Desde hace un tiempo, el plantel de Intrusos se encuentra en constante renovación, no solo cambiando conductores sino también con muchas modificaciones entre los panelistas. Con estos movimientos, el histórico programa de espectáculos de América TV busca encontrar su equipo ideal, con una mezcla de ascendentes periodistas del rubro, como Maite Peñoñori, con legendarios panelistas, como Luis Ventura y Marcela Tauro. Esta última no pudo formar parte de la emisión de este martes y su lugar lo ocupó otra vieja integrante del panel.
"Me necesitaron y acá estoy", destacó Débora D'Amato luego de que Flor de la V le diera la bienvenida al ciclo nuevamente, a un año de su comentada salida. Además de agradecer la invitación, la periodista añadió: "Y si se trata de tu cumple, acá estoy". Es que este martes fue el cumpleaños número 47 de la conductora y lo festejaron en vivo, con la visita de sus dos hijos. La presencia de D'Amato sorprendió a todos ya que dejó Intrusos hace un año atrás en medio de una fuerte polémica, luego de quejarse por cómo fue desvinculada del ciclo.
La sorpresiva y polémica salida de Débora D'Amato de Intrusos
Con un sentido mensaje en sus redes sociales, y luego de asegurar que a lo único que le tenía pánico era a quedarse sin trabajo, la periodista afirmó: “A 10 días del 28 de febrero, y en medio de mis vacaciones pendientes del 2020, me anunciaron que luego de decirnos en reiteradas oportunidades (al menos así me lo iban diciendo a mí) 'sigue el panel, tranquilos’ y a la semana siguiente ‘cambio total de panel, se decidió a último momento’, para luego recaer en el ‘solo vos salís del panel’, me quedo sin trabajo”.
“Sí, por supuesto que lloré, me preocupé (sigo en ese estado) y más. Por eso, mis vacaciones pendientes del 2020 pasaron a ser vacaciones eternas. Hoy, y no por desagradecida, me cuesta despedirme con amor y alegría, recordando geniales momentos y otros no tanto. Hoy me despido con profunda tristeza, pero sobre todo sumamente preocupada porque no sé qué será de nosotras en lo inmediato”, reconoció Débora D'Amato.