Edith Hermida se refirió al conflicto entre Wanda Nara, Mauro Icardi y "La China" Suárez y fue lapidaria con el futbolista por las actitudes que ha demostrado en las últimas semanas. La panelista de Bendita se mostró sorprendida por quienes sienten atracción sexual por el deportista y reveló por qué ella jamás estaría ene se lugar.
"Es un desprolijo, es un paparulo. A esta altura, chicas, ¿quién quiere estar con Icardi? ¡Es un tarado!", expresó la conductora de Está en tus manos, sobre el rol de Icardi en el escándalo que protagonizó y cuánto eso la deserotiza. "¿Qué hicieron todo ese rato que estuvieron en la habitación? Si no hubo relaciones, ¿de qué charlan?", sumó la panelista Ana Sicilia.
Con el sarcasmo que la caracteriza, Edith Hermida respondió la pregunta de su compañera y fue letal con el esposo de Wanda Nara y "La China" Suárez. "¡Charlan de Casi Ángeles!", expresó la celebridad, en alusión a una de las ficciones infantojuveniles más populares que protagonizó la ex de Cabré, junto con Lali Espósito, Peter Lanzani, Nicolás Riera y Gastón Dalmau. "Yo creo que ninguno de los dos puede decir una oración bimembre", remató la locutora sobre el escaso coeficiente intelectual que tendrían la actriz y el futbolista, desde su punto de vista.
El enojo de "La China" Suárez tras las acusaciones que recibió
En una carta abierta que publicó en su cuenta de Instagram, "La China" Suárez se defendió de los agravios que recibió por su amorío con Mauro Icardi. "Escribo esta carta para bajar el ruido externo de mentiras, maltratos y miradas inclinadas en la construcción de historias manipuladas para, una vez más, ser el chivo expiatorio de la violencia mediática", comenzó.
“He guardado por mucho tiempo silencio por varias razones, la principal por miedo e inexperiencia. Por no saber cómo nombrar el nivel de mentiras y atrocidades que se dicen para sustentar el minuto a minuto televisivo. Lo que está sucediendo hoy tiene detrás una historia mucho más grande y profunda, de la que seguramente muchas mujeres van a sentirse identificadas", siguió Suárez y agregó: "Me ha tocado relacionarme con hombres a los que les he creído siempre sus palabras: que estaban separados o separándose y que no había conflictos. Siento en esta situación un Deja Vu infernal. Donde vuelvo a pagar con mi reputación cuestiones que son del dominio personal de cualquier mujer".