Cómo usar la tabla de picar, según el color

Con el objetivo de evitar la contaminación cruzada, existen diferentes colores de tablas de picar. ¿Qué color se usa para cada alimento?

23 de julio, 2024 | 08.35

Quizás no lo sabías pero en la cocina las tablas de picar tienen colores diferentes con un propósito: evitar la contaminación cruzada. Aunque parece ser una simple variedad de diseño y a veces solo tenemos una o dos, cada color indica qué alimentos debemos cortar en ellas para prevenir que bacterias de ciertos productos se transmitan a otros y, así, mantener la seguridad alimentaria. Qué significa cada color.

¿Cómo usar la tabla de picar según el color?

El uso de las tablas de picar de diferentes colores ayuda a evitar que bacterias dañinas se transfieran de un alimento a otro cuando los estamos preparando. Habitualmente se considera que cada color corresponde a:

  • Rojo o naranja: Carnes rojas crudas (res, cordero, cerdo).

  • Azul: Pescados y mariscos.

  • Amarillo: Aves crudas (pollo, pavo).

  • Verde: Frutas y verduras frescas.

  • Blanco: Panes, productos lácteos y otros alimentos listos para consumir.

  • Marrón: Carnes cocidas.

Cómo usar la tabla de picar, según el color

Consejos sobre las tablas de picar y su higiene

Lo más importante luego de utilizar las tablas de cortar es mantener una buena higiene. Por lo que es clave lavar bien las tablas con agua caliente y jabón después de cada uso y desinfectarlas regularmente. Además, se recomienda mantener las tablas de cortar separadas cuando no están en uso para evitar el contacto cruzado y reemplazarlas cuando muestren signos de desgaste excesivo, como cortes profundos o roturas que pueden llegar a contener bacterias.

Cómo limpiar y desinfectar los trapos de cocina, paso a paso

Para limpiar y desinfectar los trapos de cocina, necesitarás los siguientes materiales:

  • Olla.
  • Agua caliente.
  • Blanqueador.
  • Bicarbonato de sodio.
  • Detergente.

Procedimiento, paso por paso

  1. Llenar una olla con agua caliente: el agua caliente es fundamental para eliminar la mayoría de los gérmenes y bacterias presentes en los trapos.
  2. Sumergir los trapos en el agua caliente: asegurarse de que los trapos estén completamente sumergidos.
  3. Añadir los productos de limpieza: agregar blanqueador, bicarbonato de sodio y detergente al agua. Estos productos ayudan a eliminar manchas, neutralizar olores y desinfectar los trapos.
  4. Dejar reposar unos minutos: permitir que los trapos reposen en la solución durante unos minutos para que los productos de limpieza hagan efecto.
  5. Eliminar residuos: utilizar una cuchara para retirar cualquier residuo que se desprenda de los trapos.
  6. Cambiar el agua: cuando el agua esté muy sucia, hay que tirarla y repetir el proceso si es necesario.
  7. Enjuagar bien los trapos: enjuagar los trapos bajo agua corriente para eliminar cualquier residuo de los productos de limpieza.
  8. Secar al aire libre: dejar que los trapos se sequen al aire libre. La luz solar también actúa como un desinfectante natural.