Europa descubrió un virus con capacidad de infectar células humanas y replicarse. Respecto a este tema, profesionales de la salud investigan si hay razones objetivas para temer ante la posibilidad de que sea una amenaza para los humanos y, en todo caso, evitar inconvenientes.
El filovirus europeo llamado Lloviu y que es similar al Ébola y de Marburgo fue detectado en el año 2002. Recientemente, hubo algunas teorías que obligaron su vuelta al análisis y recobró vida a través de un artículo publicado en la revista Nature Communications acerca del aislamiento pionero en murciélagos de Hungría.
Con el objetivo de despejar algunas dudas y frente a un posible diagnóstico de pandemia, los investigadores deslizaron algunas ideas: investigaron distintas especies de murciélagos que procedían de la cueva del Lloviu, en Asturias, y de ahí proviene el nombre que recibió el virus.
Esta especie de murciélago se agrupa en grandes colonias durante el período de hibernación, lo que la hace especialmente vulnerable y puede comprometer seriamente su conservación. Posteriormente, los murciélagos se comenzaron a relacionar con algunas familias de virus patógenos para los humanos como coronavirus, henipavirus o filovirus.
De esta teoría se desprende la premisa para evaluar si a corto, medio o largo plazo va a ser una amenaza sanitaria para los humanos debido al potencial patogénico de este virus para el huésped natural. Esto está vinculado con el grado de adaptación entre el virus en cuestión y la naturaleza humana.
Además de anticuerpos, en el mencionado estudio llevado a cabo en Hungría detectan el genoma de esta infección en órganos de cadáveres de poblaciones húngaras de murciélago de cueva no afectadas por mortandad masiva. También en sangre de individuos sanos e incluso en los ectoparásitos recogidos de estos mismos individuos.
¿Es una amenaza para los humanos?
La pregunta del millón fue saldada por los mismos expertos que estudiaron este tipo de patologías. El resultado arrojó que ninguna de las personas que estuvieron en contacto con los cadáveres de los murciélagos durante el episodio de 2002 presentó síntomas.
Los profesionales lograron aislar el cultivo a partir de sangre de los murciélagos de cueva infectados utilizando células de la misma especie de murciélago. En este caso, el virus obtenido en grandes concentraciones se mostraba capaz de infectar células de otros mamíferos, incluidas las de origen humano.
Existe la posibilidad de infectar a otras especies diferentes de su huésped natural pero no hay motivos para pensar en una amenaza: "Afirmar que este virus tiene potencial emergente o pandémico es totalmente especulativo y no debería usarse para generar alarma social".
Por qué los murciélagos son beneficiosos
Estos mamíferos ejercen un papel esencial en el control natural de las poblaciones de insectos y son los mejores aliados en el control vectorial tanto de enfermedades infecciosas como en la reducción del uso de pesticidas nocivos para la salud. "Es nuestra obligación protegerlos, aunque solo sea por nuestro propio interés egoísta", explicaron.