En su primer programa, Víctor Hugo Morales despedazó las operaciones mediáticas de Clarín y La Nación por la reforma judicial. En la primera emisión de "Batalla Cultural" mostraron cómo los dos medios hegemónicos intentaron tirar agua para su propio molino tras conocerse el proyecto del Gobierno.
Tantos periodistas como medios en sí están librando operaciones contra el Gobierno para que se tire para atrás la reforma judicial. Con mentiras y con la misma idea de asustar, la oposición y los medios hegemónicos que lo acompañan no revelan lo que dicen los artículos en sí. Sino que hablan sobre cómo los afecta a ellos mismos.
En uno de los artículos más llamativos de la reforma judicial se habla sobre cómo se pueden denunciar presiones de diversos medios hegemónicos. Este artículo permitiría, por ejemplo, impedir que los canales de noticias muestren las casas de jueces algo que, diferentes periodistas del grupo, han criticado proque "se quedarían sin contenido para mostrar" cuando, en realidad, significa una actitud mafiosa.
En el informe que hizo "Batalla Cultural" se revela lo que, en realidad, dice el artículo 72 de la Reforma Judicial a los cuales, varios medios apuntan porque les molesta en sus propios intereses. Allí el texto sostiene que se tiene que "comunicar en forma inmediata, al consejo de la magistratura cualquier intento de influencia en sus decisiones por parte de poderes políticos, económicos o mediáticos, miembros del poder judicial, ejecutivos o legislativo, amistades o grupo de presión de cualquier índole y solicitar las medidas necesarias para su resguardo"