Limpiar los pequeños espacios y rincones de un hogar puede ser complicado, ya que hay sectores que acumulan suciedad y polvo. Un caso muy puntual es el de los rieles de las ventanas, que por lo general no se tienen en cuenta a la hora de la limpieza, por lo que se conoció un truco casero para dejarlos impecables.
Limpiar diariamente para mantener el hogar en condiciones es fundamental, sin embargo, a veces por falta de tiempo o costumbre, algunas partes quedan sucias y continúan acumulando mugre, lo cual puede afectar a su funcionamiento en el caso de las ventanas. Por este motivo, una recomendación para que los rieles sigan funcionando correctamente hay que colocar una esponja, marcar con el fibrón las ranuras y después con un cúter cortar hasta la mitad sobre las marcas.
Luego, se debe humedecer la esponja en el agua con jabón, encajarla en los rieles de la ventana y deslizarla de un extremo al otro. De esa manera, la suciedad quedará adherida a la esponja y desaparecerá. En caso de ser necesario, se puede repetir el procedimiento y enjuagar la esponja entre pasada y pasada.
Cómo limpiar el horno eléctrico con solo 2 productos caseros: el truco más fácil
Limpiar el horno es una de esas tareas que solemos postergar debido a la percepción de que es laboriosa y demanda mucho tiempo. Sin embargo, existen métodos sencillos, rápidos y económicos utilizando ingredientes comunes como el bicarbonato de sodio y el vinagre que facilitan esta tarea.
El bicarbonato de sodio, al ser un mineral derivado del natrón, tiene múltiples aplicaciones gracias a sus propiedades limpiadoras y efervescentes. Es conocido por eliminar la suciedad incrustada en diversas superficies, incluyendo cocinas, baldosas, vajillas y ropa. Por otro lado, el vinagre blanco, elaborado a partir de la fermentación de alcohol puro, es ampliamente utilizado como desinfectante y agente antibacteriano en limpieza doméstica.
Para comenzar la limpieza del horno, reuní los materiales necesarios: guantes de goma, esponjas, estropajos, trapos de microfibra, papel de cocina, bicarbonato de sodio, agua, vinagre blanco y limón. Es fundamental realizar esta tarea cuando el horno esté completamente frío.
Paso a paso, cómo limpiar el horno con bicarbonato de sodio y vinagre
Para limpiar tu horno con vinagre y bicarbonato, deberás seguir los siguientes pasos:
- Preparar una pasta con dos cucharadas grandes de bicarbonato de sodio mezcladas en un bol de agua.
- Utilizar una esponja y un trapo húmedo de microfibra para vaciar el horno de bandejas y rejillas. Podés limpiar estas piezas en la bacha utilizando la mezcla de bicarbonato y agua. Aplicá la pasta sobre las rejillas y bandejas y dejala actuar durante unos 5 minutos antes de frotar con un estropajo y enjuagar con agua y jabón.
- Aplicar la mezcla de bicarbonato y agua en el interior del horno, asegurándote de cubrir todas las áreas. Dejá que la pasta actúe durante varias horas o preferiblemente toda la noche.
- Transcurrido el tiempo de actuación, hay que utilizar una esponja humedecida en agua caliente para raspar el bicarbonato ablandado y eliminar la suciedad.
- Para una limpieza final, hay que humedecer un trapo de microfibra en una mezcla de vinagre blanco y agua (media taza de vinagre por dos tazas de agua). Finalmente, pasar el trapo por el interior del horno para eliminar los restos de bicarbonato y suciedad.
- Por último, hay que enjuagar el trapo con agua limpia y usarlo nuevamente para asegurarte de que no queden residuos de vinagre, bicarbonato o suciedad en el interior del horno.
Si no contás con vinagre blanco, podés usar una mezcla de agua con jugo de limón, aprovechando las propiedades desinfectantes, limpiadoras y blanqueadoras del limón.
Estos métodos caseros utilizando bicarbonato de sodio y vinagre (o limón) facilitan la limpieza del horno de forma efectiva y respetuosa con el medio ambiente, sin la necesidad de recurrir a productos químicos agresivos.