Luto en Hollywood por la muerte de una de las estrellas de Beverly Hills 90210

La actriz Shannen Doherty falleció a los 53 años tras una dura batalla contra el cáncer. Recordada por su papel en Beverly Hills 90210 y Charmed, deja un legado imborrable en la industria del entretenimiento.

14 de julio, 2024 | 18.08

La reconocida actriz Shannen Doherty falleció a sus 53 años después de una larga batalla contra un cáncer metastático. Leslie Sloane, su publicista, confirmó la triste noticia a la revista People.

A lo largo de su carrera, Doherty también incursionó como productora y directora, pero sus roles más destacados fueron en las telenovelas Beverly Hills 90210, donde interpretó a Brenda, y Charmed.

La artista luchó valientemente contra la enfermedad durante muchos años, pero finalmente perdió la batalla el sábado 13 de julio. Según Leslie, estuvo rodeada de sus seres queridos y de su perro, Bowie, hasta el último momento. La familia pide privacidad en este difícil momento para poder llorar su pérdida en paz.

Shannen, quien debutó como actriz en la serie La Familia Ingalls, se convirtió en una figura televisiva de los años 90. Su papel más conocido fue el de Prue Halliwell en Charmed, pero también dejó una huella en el corazón del público interpretando a Brenda Walsh en Beverly Hills 90210. En ambos roles, Shannen logró capturar la esencia de las típicas adolescentes estadounidenses.

En 2015, a la actriz le diagnosticaron cáncer de mama por primera vez. Después de dos años, la enfermedad entró en remisión, pero desafortunadamente regresó en 2019 con más fuerza. Hace poco más de un año, Shannen compartió que su condición empeoró a pesar de los tratamientos.

La actriz expresó abiertamente sus sentimientos sobre la enfermedad en su podcast. En abril de este año, Shannen dijo que el cáncer estaba avanzando rápidamente y admitió que se estaba "preparando para morir".

El duro testimonio de Shannen Doherty antes de morir

Shannen Doherty, luego de revelar que tenía cáncer de mama, informó que la enfermedad se extendió al cerebro y a los huesos. "Mi prioridad en este momento es mi madre. Sé que va a ser muy difícil para ella si yo muero antes, por eso estoy intentando aligerarle la carga. No quiero que tenga que lidiar con un montón de cosas", declaró la actriz, que en los últimos meses regaló y vendió todas sus posesiones con el objetivo de facilitarles el proceso a sus seres queridos.

Asimismo, los beneficios obtenidos de la venta de sus objetos serán utilizados para regalarle un viaje a su madre, cumpliendo así uno de sus deseos. "Solo son cosas. No las necesito. No me dan felicidad. Lo que me hace feliz es llevar a mi madre a los lugares que siempre quiso visitar. Puedo crear recuerdos para las personas que quiero", afirmó Doherty.

"La gente asume que cuando uno está enfermo no puede hacer nada, pero no es así. Somos personas vibrantes y tenemos una perspectiva única del mundo. Queremos trabajar, abrazar la vida y seguir adelante", aseguró la actriz.

La actriz es consciente de que la lucha contra el cáncer es difícil y a veces aterradora, pero valora cada segundo de vida que tiene. "Aunque suene cursi y loco, los pacientes de cáncer somos las personas que más ganas tenemos de trabajar, porque damos gracias por cada segundo, cada hora, cada día que logramos estar aquí", concluyó.

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