Faltan tan solo unas horas para que se dispute la gran final del Apertura de la Liga Latinoamérica de League of Legends. El sábado 10 de abril desde las 19 hs comenzará la primera definición regional del año para el MOBA creado por Riot Games y el ganador obtendrá su pase para el Mid-Season Invitational (MSI) 2021, el segundo torneo internacional más relevante de la disciplina, solo por debajo del mundial. La final será entre el equipo argentino Furious Gaming y Gillette Infinity, cuyas máximas figuras son los compatriotas Whitelotus y Ackerman.
El Destape habló con Martín Blaquier, gerente senior de eSports para Latinoamérica de Riot Games, sobre el crecimiento de las escenas competitivas de los diferentes videojuegos de Riot Games y el ecosistema en general, el nivel latinoamericano en deportes electrónicos y qué diferencia a los argentinos en un universo que no para de expandirse. Blaquier es el encargado de liderar los equipos dentro de la compañía responsable de LoL que se focalizan en la creación, desarrollo y comunicación de eSports. Tanto en cuanto a League of Legends como en los otros títulos de Riot Games que tienen escenas competitivas, como Valorant, Teamfight Tactics y Legends of Runeterra.
La final llega con un fuerte componente argentino, ¿qué notás que diferencia a los argentinos del resto?
Somos muy fanáticos de los deportes. Cuando nos metemos con algún deporte hay una pasión que es única, y es algo que no solo se transmite en el fútbol. Eso creo que es un diferencial pero también que el argentino desde siempre ha sido muy gamer. La industria de los videojuegos en Argentina es sumamente importante y tiene un crecimiento enorme año a año. Entonces en esas dos cuestiones creo que el argentino tiene un plus.
¿Cómo tomaron los equipos que el Split se realizara de forma virtual?
Haber dicho que íbamos a ir de manera online no fue nada fácil para nadie. Es una cuestión que nos excede a todos y creo que tanto los equipos como los pro players han hecho un trabajo increíble para adecuarse a esa situación. Obviamente están entusiasmados de poder volver. Creo que como cualquier otro deporte o competición tener ahí enfrente al rival, estar con tus compañeros y todo el show de producción que hay alrededor, lo hace único, diferente, más emocionante.
El crecimiento de los eSports
¿Cómo analizás el crecimiento de las escenas competitivas de Riot?
El crecimiento que hemos tenido es sorprendente. Ya el año pasado con el lanzamiento de Valorant teníamos alguna idea de cuán bien le podía ir porque el gamer sudamericano suele ser muy fanático de los shooters. Valorant tuvo un crecimiento increíble y rápidamente se convirtió en una escena muy robusta, donde ya tenemos los campeones del primer Masters, y dentro de las próximas semanas vamos a tener al primer representante latinoamericano en la primera instancia global de Valorant.
¿Y el caso de Latinoamérica en general?
Lo que estamos viendo en Latinoamérica es un crecimiento gigantesco de todo el ecosistema de los eSports en varios juegos. No solamente en los juegos de Riot Games, si somos honestos. Es un reflejo también de la inversión que han hecho otras empresas junto con Riot para el crecimiento del ecosistema. Lo que vemos es un enorme interés por parte de comunidades, de los equipos, de jugadores profesionales, que levantaron la vara y el nivel de una manera asombrosa.
Sin dudas hemos tenido un crecimiento exponencial. Creo que la pandemia lo que nos dio fue un empujoncito. Al estar tanto tiempo encerrados y con los deportes convencionales cancelados o pospuestos, hubo un pequeño salto. Pero en ese salto creo que lo que hemos transmitido, y no hablo solamente de Riot, sino de todo el ecosistema en general es un enorme potencial: lo entretenido, lo emocionante que es ver una partida de eSports. Creo que no tiene nada que envidiarle a cualquier otro deporte nacional. Y eso conlleva un cambio cultural.
¿Qué le falta a los equipos y jugadores latinoamericanos para llegar al nivel de los asiáticos, europeos y estadounidenses?
En Latinoamérica solo estamos un par de años atrasados. En Asia llevan décadas establecidos; en Europa y Estados Unidos nos llevan unos cinco años de esa transición. Es una cuestión de tiempo. Los eSports llegaron para quedarse y para competirle de igual a igual a los deportes tradicionales. Ya no es un nicho, pero igual le falta un poco de tiempo. Y el talento sin dudas está ahí. El latinoamericano va a estar sin dudas a ese nivel.