Carlos Monzón fue un ícono del boxeo argentino, reconocido como uno de los mejores en su deporte. En la década de 1970, alcanzó la cima al obtener el título mundial de peso mediano, el cual logró mantener durante su carrera hasta su retiro en 1977. A pesar de su éxito en el ring, su vida fuera de él estuvo marcada por tragedia y escándalo. Monzón fue condenado por el asesinato de su expareja, Alicia Muñiz, en un caso que conmocionó a toda la Argentina. Su condena fue por homicidio simple, ya que en ese entonces no existía la categoría legal de femicidio.
Alicia Muñiz, modelo y actriz uruguaya, conoció a Monzón en 1978 durante un viaje al extranjero. Su relación se formalizó más tarde y tuvieron un hijo juntos, Maximiliano Roque Monzón. Sin embargo, la relación terminó en 1986. El trágico desenlace llegó en 1988, cuando Monzón, tras una violenta pelea, arrojó a Muñiz desde un balcón, acabando con su vida. En ese momento, su hijo Maximiliano estaba en la casa.
¿Quién es y qué fue de la vida de Maximiliano Monzón?
Maximiliano Roque Monzón, ahora de 43 años, siempre mantuvo un perfil bajo, evitando la atención mediática. Tras el asesinato de su madre, fue criado por sus abuelos maternos en Uruguay y, siendo adulto, buscó conocer a sus medios hermanos en Santa Fe, fruto de las otras relaciones de su padre.
Nació en diciembre de 1981, por lo que era un niño cuando su padre mató a su madre. Además, estaba en la casa en Mar del Plata al momento del femicidio. Durante mucho tiempo estuvo internado en una clínica de rehabilitación por problemas de drogas.
¿Cuántos hijos tuvo Carlos Monzón?
Carlos Monzón tuvo cinco hijos en total, con tres parejas diferentes. Su hijo mayor, Carlos Alberto, fue producto de su relación con Zulma Encarnación Torres, su primera esposa y con quién convivió entre 1958 y 1961. Un año después, en 1962, Monzón se casó con Mercedes Beatriz García, con quien tuvo a Silvia Beatriz, Abel y Carlos Raúl. Carlos Raúl y Silvia son usuarios activos en redes sociales, compartiendo momentos familiares y recuerdos de su padre, mientras que Abel mantuvo más bien un perfil bajo.
La historia familiar de Monzón está marcada por un legado deportivo en el ring y una vida personal turbulenta que dejó una huella indeleble en la historia del deporte argentino. Pero también en la política: el asesinato de su ex esposa, marcó un antes y un después en la movilización social respecto a la violencia de género.
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