Florencia de la V aprovechó su cuenta de Instagram para compartir un conmovedor posteo para homenajear el Día Internacional del Orgullo LGBTIQ+. "Voy a hablarles de amor", adelantó Flor junto a una imagen en la que está con su marido Pablo Goycochea durante su casamiento por civil cuyo aniversario coincide con el de la Revuelta de Stonewall.
Tras sancionarse la Ley de Matrimonio Igualitario en julio del 2010, el 28 de junio de 2011, la actriz cumplió uno de sus sueños al contraer, con su documento femenino, matrimonio civil con Pablo Goycochea, su pareja desde 1998, con quien ya se había casado simbólicamente en 2008 con una concurrida e inolvidable celebración y con quien tiene a sus dos hijos, Paul e Isabella.
Para recordar la lucha de los participantes que se rebelaron contra las razzias policiales en la mítica Revuelta de Stonewall, cada 28 de junio se conmemora el Día Internacional del Orgullo LGBTIQ+ y Flor aprovechó la fecha para referirse a las dos celebraciones que la interpelan. "Quiero contarles una hermosa historia porque se dice mucho de nosotras, pero poco se habla de nuestro derecho a amar y ser amadas a plena luz del día y no en la clandestinidad. Sin condicionamientos. Hoy puedo contar mi historia de amor porque tuve suerte, o porque no hubiera aceptado nunca que fuera de otra manera", destacó.
"Desde el principio supe que Pablo era diferente a todos. Nos conocimos un 11 de diciembre de 1998. Al poco tiempo fui su novia a los ojos de todo el mundo y jamás puso una sombra sobre mí. Nuestro amor sobrevivió a todos los prejuicios que se puedan imaginar y enfrentamos cosas muy dolorosas, pero nunca nos escondimos. Él siempre dio la cara por mí y esto no debería ser algo a destacar. Nadie debería sentir que tiene que agradecer y justificarse frente a la sociedad", continuó.
En esta línea, la activista celebró, a diferencia de muchas de sus compañeras, poder experimentar una relación ya que, precisó: "lxs travestis y las personas trans somos un blanco fácil para algunos sujetos que, en nombre del 'amor', se aprovechan de nuestra vulnerabilidad". "Las historias maravillosas solo ocurren en la fantasía, así que debo admitir que la mía tuvo, como cualquier otra, sus sinsabores y sus dichas, pero no puedo obviar que el colorín colorado es muy simbólico: nos casamos exactamente hace diez años, un 28 de junio", enfatizó.
"Hoy quise compartir mi testimonio: decir que es posible experimentar la felicidad del amor. Del amor bueno. Del amor que sana, cuida, cura, abraza y construye. Comencemos con abrazarnos, respetarnos y creer con firme convicción que somos merecedoras de algo mejor", concluyó el posteo para su millón de seguidores.