Los huevos de Pascua serán los protagonistas del fin de semana largo de abril en el que los creyentes conmemorarán la Semana Santa. Si bien los comprados suelen ser los más famosos, hay una técnica para que los huevos caseros queden como si recién salieran de cualquier fábrica de chocolate conocida. Además, es una gran experiencia para compartir con seres queridos.
Además, en estas fechas hay emprendedoras y emprendedores que aprovechan el crecimiento de la demanda de esta golosina para incrementar sus ingresos. Por lo tanto, el consejo acerca de qué materiales utilizar nunca está demás. Tanto para compartir un momento especial con los más chicos de la casa como para diversificar la fuente de ingresos de abril.
El mejor chocolate para los huevos de Pascua
En realidad, cualquier chocolate sin lácteos que te guste está perfecto. Podés utilizar chocolate para repostería, que suele tener un 50-55% de cacao, o un chocolate más amargo, por ejemplo con un 75% de cacao para un sabor más intenso, o incluso mezclar chocolates. No es recomendable utilizar chocolates con más del 85% de cacao porque pueden quedar muy secos, pero se puede mezclar una pequeña cantidad con el chocolate principal que vayas a usar.
El secreto de los huevos de Pascua perfectos
El secreto para que los huevos de pascua salgan perfectos, crujientes y brillantes, y parezcan comprados, es atemperar el chocolate. Se trata de derretir el chocolate con cuidado y en dos tandas para favorecer esa textura tan buena. Cuando queremos hacer un chocolate brillante y crujiente, como huevos de pascua, bombones, coberturas finas o figuritas, tenemos que tratar el chocolate de una forma especial para que al enfriarse nos dé ese resultado.
El motivo principal es la manteca de cacao que contienen. Es la grasa del chocolate la que hace que el chocolate sea tan suave y sedoso cuando lo derretimos y la que hace que el chocolate quede firme y se deshaga en la boca. La manteca de cacao es dura a temperatura ambiente, si la compras sola verás que son como bloques duros y amarillentos.
Cuándo se empezaron a hacer y regalar huevos de Pascua
Tradicionalmente, en Pascua se regalaban huevos reales decorados. Los huevos de chocolate son una innovación relativamente reciente. Comenzó a principios del siglo XIX en Francia y Alemania principalmente, y se trataba de huevos macizos, ya que la técnica para hacer los huevos huecos no estaba desarrollada. Cada huevo era decorado con más chocolate o con flores de azúcar.
La innovación tecnológica de los siglos XIX y XX perfeccionó la chocolatería y la repostería en general, y permitió que los huevos de pascua se puedan hacer de forma masiva y se vuelvan populares en todo el mundo. Aunque en el último tiempo se retomó la chocolatería artesanal, ya sea por mujeres emprendedoras o como actividad grupal para divertirse y crear algo junto a seres queridos.