Preocupación por la triple extinción que puede terminar con la Tierra: la advertencia de los científicos

Un estudio alarmante advierte una triple extinción en la Tierra. Qué accionar humano aceleraría el proceso.

09 de mayo, 2024 | 21.18

El avance acelerado del cambio climático es cada vez más preocupante y las señales de alarma no dejan de sonar. Un estudio realizado en la Universidad de Bristol pronostica que en un futuro no muy lejano, la Tierra podría verse afectada por múltiples erupciones volcánicas que podrían desencadenar una "triple extinción" y poner en peligro toda forma de vida en el planeta.

Este escenario apocalíptico se basa en modelos climáticos de supercomputadoras y plantea un futuro en el que la superficie terrestre se convertiría en un supercontinente caliente, seco e inhabitable debido a las emisiones masivas de dióxido de carbono provenientes de los volcanes.

Aunque este pronóstico se estimó para dentro de unos 250 millones de años, no podemos ignorar que estamos experimentando las consecuencias de la crisis climática desde hace tiempo y que los fenómenos meteorológicos cada vez son más devastadores. Esto se traduce en un aumento significativo de las temperaturas globales y un empeoramiento del cambio climático, con proyecciones que indican que las temperaturas podrían alcanzar entre 40 y 50 grados Celsius debido también al incremento en la temperatura del Sol.

Alexander Farnsworth, autor principal del estudio, describe este escenario como un "triple golpe" para nuestro planeta, combinando los efectos de continentalidad, un Sol más caliente y altas concentraciones de CO2 en la atmósfera. A pesar de los esfuerzos por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, el estudio advierte que la extinción total sería inevitable.

En este contexto, la humanidad se enfrentaría a la escasez de recursos esenciales como el agua y tendría que ingeniárselas para asegurar la disponibilidad de alimentos, además de buscar alternativas que no dependan de este recurso natural en su producción.

Además de estos desafíos, el aumento en las erupciones volcánicas plantea peligros directos e indirectos, como flujos de lava, lluvias de ceniza y emisiones de gases tóxicos, que complicarían aún más el equilibrio de nuestro planeta. Eunice Lo, coautora del estudio e investigadora en Cambio Climático y Salud de la Universidad de Bristol, destacó la importancia de abordar la crisis climática actual y lograr emisiones netas cero lo antes posible para mitigar estos impactos.

Se supo cuál es el plan de la NASA ante la llegada de un asteroide apocalíptico

La NASA evaluó cuidadosamente sus planes de contingencia en caso de un evento cósmico catastrófico. El doctor Kelly Fast, experto en defensa planetaria, señaló la importancia de detectar y monitorear asteroides peligrosos antes de que representaran una amenaza real para nuestro planeta. Según él, es "fundamental encontrar estos cuerpos celestes antes de que nos encontraran a nosotros y estar preparados para intervenir si fuera necesario".

La Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria de la NASA se comprometió en la búsqueda de posibles asteroides que pudieran suponer una amenaza para la Tierra. Mantener una vigilancia constante del espacio era crucial para prever cualquier riesgo y tomar medidas proactivas para proteger nuestro planeta.

El Dr. Fast explicó que si se identificaba una amenaza de impacto de asteroide con años o décadas de anticipación, existía la posibilidad de llevar a cabo una misión de desviación. Sin embargo, enfatizó que la prioridad era detectar y monitorear estos asteroides de manera efectiva.

En caso de que se confirmara una amenaza de impacto, la NASA emitiría una notificación oficial, primero dirigida al gobierno del país afectado, antes de informar a nivel global y comunicarlo a las Naciones Unidas. Según los protocolos actuales, si el asteroide se encontraba a años de distancia, se intentaría desviarlo. Sin embargo, si el plazo era de menos de cinco años antes del impacto previsto, se consideraría la opción de destruir el asteroide en lugar de intentar desviarlo.

En el 2022, la NASA llevó a cabo la misión Prueba de Redirección de Doble Asteroide (DART)en la que impactó un asteroide en el espacio profundo. Esta prueba tenía como objetivo probar la eficacia de la tecnología para desviar asteroides peligrosos antes de que representaran una amenaza para la Tierra. Los resultados fueron prometedores y demostraron que era posible reducir la órbita de un asteroide en caso de un impacto inminente.

Durante la misión, la nave DART chocó intencionalmente con el asteroide Dimorphos, una luna de un planeta menor conocido como Didymos. Aunque Dimorphos no representaba una amenaza en ese momento, este experimento demostró la capacidad de desviar la órbita de un objeto espacial. El asteroide se encontraba a unos 11 millones de kilómetros de nuestro planeta en el momento del impacto, asegurando la seguridad terrestre durante el experimento.

Los resultados del experimento DART fueron alentadores, ya que lograron reducir la órbita de Dimorphos en un tiempo significativo. Aunque el objetivo inicial era reducir la órbita en 73 segundos, el impacto de la nave DART logró acortarla en 32 minutos, mostrando el éxito de la tecnología espacial para mitigar el riesgo de impacto de asteroides.