Es más normal de lo que uno cree que haya gente que hable sola. Ocurre mucho durante las caminatas, en las jornadas laborales, incluso en casa cuando se piensa en voz alta. Si bien muchos podrían creer que tiene que ver con un problema de salud mental, los psicólogos revelaron su verdadero significado y sorprendieron a todos. El profesor y licenciado en psicología de la Universidad d Wisconsin (Estados Unidos), Gary Lupyan, investigó esta conducta y concluyó que conversar en soledad puede aportar múltiples beneficios, como recuperar recuerdos, mayor seguridad personal y una mejor concentración, entre otras.
Fue durante una entrevista con la BBC, que Lupyan explicó que hablar solo “no es una acción irracional”, ya que “no sabes todo lo que vas a decir”. En esa línea, explicó que su estudio tenía que ver con agrupar personas que leyeran objetos de la pantalla de una computadora y auqellos que lo leían en voz alta tenían más probabilidades de recordarlos.
“Decir un nombre en voz alta es una poderosa clave de recuperación”, destacó Lupyan, y agregó: “Piénsalo como un indicador para una parte de información en tu mente. Escuchar el nombre exagera lo que normalmente ocurre cuando solo lo traes a la memoria. El lenguaje impulsa ese proceso”. Por otro lado, los especialistas mencionaron que el habla es un músculo del cerebro, ya que cuando intentamos recordar algo, solemos repetirlo en voz alta y eso ayuda a que la mente retenga mejor la información.
Cuáles son los beneficios de hablar solo según los expertos:
- Mejora la memorización: Hablar en voz alta facilita la retención de información.
- Aumento de la productividad: Ante situaciones desafiantes, hablar solo puede servir de ánimo y motivación.
- Clarificación de metas: Expresar objetivos en voz alta ayuda a clarificarlos y reforzarlos.
- Aprendizaje acelerado: Hablar en voz alta mientras se realizan actividades complejas puede acelerar el aprendizaje.
- Reforzamiento de la autoestima: Felicitarse por logros personales en voz alta es beneficioso para la autoestima.
- Resolución de problemas: Enfrentar dificultades hablando en voz alta facilita encontrar soluciones más fácilmente.
Beneficios de hablar en voz alta
Potencia la memoria
Hablar solo es una técnica eficaz para mejorar la memoria. Al verbalizar la información, se crea una conexión más fuerte entre el contenido y su recuerdo. Esto es particularmente útil para el aprendizaje, ya que explicar algo en voz alta puede ser más efectivo que hacerlo en silencio o explicárselo a alguien más.
Estrategia de motivación
Enfrentar situaciones desafiantes puede ser menos estresante si uno se da ánimos a sí mismo en voz alta. Utilizar la tercera persona al motivarse, por ejemplo, "Tú puedes hacerlo", puede activar recuerdos de apoyo y aumentar la respuesta positiva, proporcionando una mayor fortaleza mental y emocional.
Refuerzo de objetivos
Exponer los propios objetivos en voz alta ayuda a clarificar las metas y fortalecer su recuerdo. Esta práctica facilita la planificación y el seguimiento de los pasos necesarios para alcanzar dichos objetivos, mejorando así la productividad y el enfoque.
Guía de actuación
Hablar solo mientras se realizan actividades complejas o que requieren una secuencia específica de acciones puede ser una excelente manera de interiorizar los pasos necesarios y aprender rápidamente. Esta guía verbal proporciona estructura y claridad, reduciendo la posibilidad de errores.
Refuerzo positivo
Felicitarnos a nosotros mismos en voz alta puede ser muy beneficioso para la autoestima. Este refuerzo positivo es especialmente útil en épocas de alta exigencia o desafíos personales y académicos. Reconocer los propios logros verbalmente fortalece la confianza en las propias capacidades.
Mejora la reflexión
Cuantas más dificultades presenta una tarea, más se recurre al lenguaje para resolverla de manera efectiva. Hablar solo permite organizar pensamientos, analizar opciones y tomar decisiones de forma más reflexiva y coherente.
Desarrollo de la inteligencia
Hablar solo ayuda a ser más organizado, resolver problemas de forma efectiva, recordar cosas con facilidad y controlar mejor las emociones y sentimientos. Esta práctica también fortalece el ánimo, lo que resulta en una respuesta más inteligente tanto física como emocionalmente.