El pasado lunes 26 de julio, Santiago Moreno Charpentier, más conocido como “Chano”, fue ingresado a terapia intensiva en el Sanatorio Otamendi. De acuerdo con el informe policial, el músico había sufrido un brote psicótico, producto de un consumo excesivo de sustancias tóxicas, y había intentando atacar a un oficial con un cuchillo. El hecho ocurrió en su hogar, en donde Chano se encontraba con su madre, Marina Charpentier. Cuando la policía intervino, el cantante recibió un disparo en su zona abdominal y actualmente lucha por su vida.
Tras esta versión oficial que aseguraba que el intérprete de Obsesionario en la Mayor había querido herir a su madre y al policía, Marina conversó con algunos medios de comunicación, que la estaban esperando afuera del Otamendi. “No voy a contestar ninguna pregunta”, comenzó, entre lágrimas y con la voz quebrada. “Solo voy a decir que acá no hay nadie contra nadie. No es una mamá contra la policía. ¿Cómo voy a estar en contra de la policía de Capilla del Señor, que es la gente que nos cuida y ha ayudado a mi hijo tantas veces?”, sentenció.
“Acá solo hay víctimas. La primera víctima es mi hijo, que está luchando por su vida. La mamá de Amendolara, que debe estar sufriendo como yo”, prosiguió, en referencia a la madre del policía que le disparó a Chano. “Y todas las mamás de todos los Chano que padecen la enfermedad de la adicción, que piden ayuda y no tienen respuestas. Yo solo llamé a la guardia médica para que ayuden a mi hijo”, relató Marina.
“Sabían que se iban a encontrar con alguien que estaba mal. Yo solo pedí ayuda. No sé a quién tenían que mandar o cómo es el procedimiento. Solo pido que hagan algo con la Ley de Salud Mental porque estamos todos los padres de los enfermos sin respuesta”, declaró. “La adicción es una enfermedad y nadie nos da respuesta, está lleno de madres que no tienen visibilidad, que están golpeando puertas y nadie las escucha”.
“Quiero agradecer al Sanatorio Otamendi y a toda la gente que nos ha respetado y le mandan fuerza a mi hijo. Y si quieren saber lo que padece un adicto, escuchen las letras de mi hijo. Mi hijo pide ayuda hace 20 años”, continuó. “Quiero agradecerle a su equipo terapéutico, que lo atiende hace toda una vida, porque mi hijo hace 20 años que está en tratamiento. Por favor, déjenme en paz”.
El triste testimonio de un vecino de Chano
Esta misma semana, Mariano, un vecino de Chano, contó públicamente un episodio que había vivido con él días atrás, cuando se lo encontró caminando por la Ruta 6. El hombre estaba manejando su auto, cuando de repente, se le cruzó una persona y tuvo que girar el volante bruscamente para no atropellarla. Era Chano. “Estaba muy mal, totalmente perdido. No sabía dónde estaba”, relató Mariano. Cuando el cantante lo vio, le dijo que se había caído de la moto y le pidió ayuda para buscarla.
Después de muchas horas de buscar el vehículo y no encontrarlo, Chano le dio las llaves y le pidió que se la lleve si la veía. Más tarde, él se las llevó a su madre hasta el sanatorio. “Me dijo que había salido a las 4 de la madrugada a comprar cigarrillos. Cuando yo lo encontré eran casi las 6, o sea que anduvo deambulando un rato largo. Es un pibe bárbaro, muy educado. Estaba muy solo. Me dio mucha pena”, recordó el vecino.