Todos sabemos que WhatsApp es un viralizador de fake news y de fotografías falsas. Si eres un habitual de esta aplicación, en varias ocasiones te habrán enviado enlaces a noticias increíbles o imposibles de creer o fotografías que no dicen toda la verdad o que no son lo que te dicen que son.
Pero de la misma manera que es fácil enviar mentiras por WhatsApp, también es fácil detectarlas. Y aunque Facebook ha ido introduciendo medidas para combatir las noticias falsas, no puede llegar a todas partes. Pero tú mismo puedes detectar fotografías falsas en segundos.
TinEye
Primera manera de detectar fotos falsas en WhatsApp: con TinEye. Desde tu ordenador o desde tu propio smartphone, puedes abrir este buscador de imágenes inverso. Su labor es encontrar en internet imágenes idénticas a la que tú buscas. Esto te será de gran utilidad porque así descubrirás si lo que te mandan es una fotografía original o si ha sido falseada o sacada de contexto. Si no te convence esta herramienta, prueba con las alternativas disponibles. Los propios buscadores tienen este tipo de búsqueda.
Forensically
La herramienta online y gratuita Forensically te permite analizar una fotografía cualquiera para detectar posibles cambios. Puedes analizar la imagen con la lupa, ver sus metadatos y datos geográficos, analizar su luz o contraste, el ruido de la fotografía, detectar si se han clonado partes de la foto. La respuesta no es automática. Es decir, tú tendrás que manejar las opciones que ofrece esta herramienta y ver si en la vista previa se detectan cambios. En ocasiones no es fácil verlos, pero en otras se ven a la rápidamente.
EXIFdata
El tercer método para detectar fotografías falsas es acudiendo a sus metadatos. Es decir, la información que guarda un archivo sobre sí mismo y que no son visibles a simple vista. En el caso de las imágenes, esta información resulta de gran utilidad para conocer a quién hizo la imagen o si la retocó.
Con páginas como EXIFdata puedes subir una imagen y ver sus datos ocultos o metadatos. Verás su resolución, con qué cámara se sacó la fotografía, información sobre la codificación del archivo, el software empleado para su edición, cuándo se modificó,y formato.
Puede que gran parte de esos datos no te digan nada, pero si una imagen te llega sólo con datos de la cámara que la creó, podrás confiarte más que si la fotografía fue retocada previamente con Photoshop.