Muchas personas eligen tomar una taza de café para iniciar el día o para tener un refuerzo de energía que las ayude a seguir con la rutina, algunas creen que es mejor tomarlo sin azúcar, pero ¿es verdad? Te contamos qué efectos produce tomar café sin azúcar.
Qué pasa si tomo café sin azúcar: los efectos que produce
El café tiene muchísimos beneficios que se pueden aprovechar al máximo si no se consumen agregados como el azúcar. Por ejemplo, tiene la capacidad de mejorar el sueño y de acelerar el metabolismo y, así, favorecer a la pérdida de peso con mayor facilidad sin necesidad de dietas estrictas o ejercicio en gran cantidad.
Específicamente el consumo de café en ayunas favorece a aquellas personas que desean bajar de peso, si se toma el café media hora antes de hacer ejercicio. Además, al destacarse por su alta concentración de cafeína estimula el metabolismo del cuerpo, lo que conduce a una quema más rápida de grasas porque, siempre y cuando se consuma sin añadidos como azúcar o crema, el café aporta muy pocas calorías y se vuelve una opción más saludable para quienes desean controlar su ingesta calórica.
De acuerdo a los especialistas, uno de los principales beneficios del consumo de café sin azúcar es la estimulación y el shock de energía que proporciona logrando hacer que el cuerpo esté activo y despierto por más tiempo. Además, otra de las ventajas es que la cafeína, principal componente de esta bebida, no se almacena en el torrente sanguíneo ni en el organismo en general y es expulsada por el cuerpo mediante de la orina horas después de haber sido consumida.
Mientras que los compuestos antioxidantes del café, además, ayudarían a evitar la acumulación de proteína beta-amiloide en el cerebro (la principal causa de Alzhéimer), mejoran también el ánimo y estimulan la atención, de acuerdo a un trabajo del Ciber de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN) y del Instituto de Investigación Sanitaria Pere Virgili que ha sido publicado en la revista European Journal of Nutrition.
¿Hace mal el café descafeinado?
Existen diferentes procesos para llegar a hacer café descafeinado y dos de los métodos más comunes utilizan cloruro de metileno o acetato de etilo para extraer y disolver la cafeína. Si bien se pone a los granos de café en contacto directo con las sustancias químicas que son consideradas peligrosas, según los expertos esto no representa un problema porque una vez tostados los granos de café suelen perderlas.
Uno de los métodos para descafeinar es con la cocción al vapor de granos de café verdes, sin tostar, para que se hinchen y abran los poros, después los granos se enjuagan en cloruro de metileno o acetato de etilo para eliminar la cafeína. Luego se cuecen nuevamente al vapor y se lavan para eliminar los residuos químicos, y luego se tuestan. De acuerdo a Tonya Kuhl, directora del departamento de Ingeniería Química de la Universidad de California en Davis, ese método no representa un problema porque es muy poca la cantidad de sustancias químicas a la que estás expuesto con el café descafeinado.
Las personas en contacto a niveles más altos de cloruro de metileno, como los trabajadores que lo utilizan para remover pintura o desengrasar metales, sí podrían tener un mayor riesgo de padecer cáncer de hígado y pulmón y otros daños en el sistema nervioso central. Este producto se utiliza para descafeinar porque la Administración de Alimentos y Medicamentos ha determinado que el café no debe contener más de un 0,001% de cloruro de metileno y, al respetar esto, según Kuhl, sería imposible tomar el suficiente café descafeinado para exponerse a niveles peligrosos de cloruro de metileno.
Algo similar ocurre con la otra sustancia utilizada en el proceso de descafeinado: el acetato de etilo, que según Brenner tampoco es muy preocupante porque se encuentra de forma natural en algunas frutas, como el kiwi y la guayaba, y se utiliza en otros productos como el esmalte de uñas y la tinta de impresión. Si bien la exposición a esta sustancia por inhalación, ingestión o contacto con la piel puede irritar los ojos, la piel o la garganta, según los expertos, el acetato de etilo en el café no supone una amenaza para la salud.