Por qué el café me hace ir al baño

El café es una bebida que tiene más de 1.000 compuestos químicos, de los cuales disponen de propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

03 de junio, 2024 | 11.30

Si bien el café ayuda a empezar la rutina del día, la bebida energética es buena para otras cuestiones de salud, por ejemplo, puede estimular los movimientos intestinales. Los expertos opinaron sobre los efectos del café. 

El café es una bebida que tiene más de 1.000 compuestos químicos, de los cuales disponen de propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Y decidir cómo impactan los intestinos es un desafío.

Cómo impacta el café en los intestinos

El Dr. Kyle Staller, director del Laboratorio de Motilidad Gastrointestinal del Hospital General de Massachusetts, explicó que "en algunos casos, como con el café y los movimientos intestinales, es probable que no haya existido una demanda médica suficiente para hacer una investigación seria”. Por otro lado, la experta indicó que “se necesitan varios estudios para saber que el café ayuda al movimiento intestinal cuando representa una parte tan importante de la vida diaria de muchas personas”.

café

Staller, también profesor asistente de medicina en la Facultad de Medicina de Harvard aseguró que “beber café fue más efectivo que el agua tibia para inducir los movimientos intestinales, lo que lleva a que el “agua es una parte integral de la digestión normal y el tracto digestivo libera y reabsorbe grandes cantidades de ella todos los días".

Algunos estudios sobre el tema confirmaron que no es la cafeína lo que genera ir al baño. Un estudio lanzado en 1998, informó que el café descafeinado tenía un efecto igualmente estimulante en el colon que el café con cafeína, mientras que no ocurrió lo mismo con una taza de agua caliente.

El café no funciona en todas las personas del mismo modo. En una investigación realizada en 1990 por la revista Gut, 92 jóvenes adultos contestaron unas preguntas sobre cómo el café traía consecuencias en sus hábitos de evacuación; sólo el 29 por ciento aseguró que “inducía un deseo de defecar”, y la mayoría de ellos —63 por ciento— eran mujeres.

En el mismo estudio, algunos voluntarios dieron permiso a que se les introdujera una sonda detectora de presión en el colon para ver las contracciones del músculo intestinal previo y después de tomar una taza de café para evaluar el efecto del mismo. Quienes aseguraron que el café era bueno para la evacuación, la sonda demostró un aumento en la presión a los cuatro minutos de beber café, mientras que las personas no responsivas no presentaron cambios en la actividad del colon.