Qué puede pasar con el motor del auto si le pongo un mal lubricante

El aceite del motor es esencial para la lubricación, enfriamiento, limpieza y sellado del motor, lo que ayuda a prolongar su vida útil y garantiza un rendimiento óptimo. Elegir el mejor aceite para tu auto y comprobar periódicamente su nivel en el motor es crucial para evitar fallas e inconvenientes.

Además, un correcto mantenimiento del filtro del aceite, que filtra el lubricante y retira las impurezas generadas durante el funcionamiento, es igualmente importante.

Causas comunes de problemas en el motor

Los problemas en el motor pueden surgir por varias razones, entre las que se incluyen:

1. Errores de diseño o de especificación: Dimensión, rotación, material y ajuste inapropiados pueden afectar el rendimiento del motor.
2. Errores de fabricación: Defectos en el proceso de fabricación pueden llevar a fallas prematuras.
3. Instalación inapropiada: Una desalineación, fundación inadecuada o vibraciones pueden causar daños.
4. Mantenimiento inapropiado: La falta de lubricación, uso de lubricante inadecuado o falta de control de vibración pueden generar contaminantes que afectan el motor.
5. Sobrecargas y choques: Las sobrecargas, choques o vibraciones pueden desencadenar la ruptura de componentes más débiles.

Los 5 principales problemas ligados a la lubricación

1. Consumo de aceite en motores nuevos: Es normal que los motores nuevos consuman más aceite inicialmente hasta que se estabilizan. Con el tiempo, el desgaste de cilindros, anillos de segmento y pistones puede incrementar el consumo de aceite. Es crucial acondicionar y limpiar el motor para mantener los valores normales.
2. Viscosidad del aceite: Una menor viscosidad del aceite puede aumentar su consumo, pero mejorando el arranque y ahorrando combustible al reducir la fricción del motor. El desgaste de las piezas es inevitable, pero el uso del aceite adecuado puede retrasarlo.
3. Formación de depósitos: La baja temperatura y la ventilación inadecuada del cárter pueden generar depósitos en el motor. Utilizar un aceite con alta estabilidad a la oxidación y buen grado dispersante es esencial para mantener las piezas en óptimo estado.
4. Cambio en la presión del aceite: La presión del aceite depende de su viscosidad. Variaciones en los grados SAE pueden indicar problemas mecánicos. La presión elevada o baja del aceite puede afectar el rendimiento del motor y debe ser monitoreada.
5. Dificultad en el arranque: Un aceite de alta viscosidad puede dificultar el arranque del motor en frío. Utilizar el lubricante recomendado por el fabricante es vital para evitar problemas de compresión y regulación del sistema de inyecciones.

Control regular del motor: una necesidad vital

Controlar el motor regularmente es fundamental para evitar problemas de lubricación que afecten el funcionamiento del vehículo. Monitorear y analizar el aceite en estaciones de servicio permite identificar y reparar problemas como consumo excesivo de aceite, alto desgaste de piezas, formación de depósitos, cambios en la presión del aceite, dificultad en el arranque y corrosión.