Los 10 mejores lugares para visitar en Chile

Descubre los mejores lugares para visitar en Chile, un viaje diseñado para aventureros y amantes de la naturaleza.

24 de enero, 2024 | 09.52

Desde el esplendor árido del Desierto de Atacama hasta la inexplorada majestuosidad de la Isla Tierra del Fuego, Chile se revela como un paraíso diverso para el turista argentino. No se trata solo de cruzar una frontera, sino de adentrarse en una aventura donde cada destino despliega historias, belleza natural y retos a vencer. Al planificar vuestro próximo viaje, permitan que la riqueza cultural y los paisajes inigualables de Chile os guíen hacia experiencias inolvidables.

Santiago emerge como un mosaico de modernidad y tradición, donde el Cerro San Cristóbal promete postales urbanas bajo la sombra de los Andes. Pero más allá, las costas chilenas susurran el secreto de sus playas ocultas y pueblos pintorescos que narran el vibrante testimonio de un país orgulloso de su legado. Sumergíos en la autenticidad de sus ciudades y dejad que la hospitalidad chilena os acompañe a lo largo de este viaje por la tierra del poeta Neruda y del fin del mundo.

Pichilemu

Olas legendarias y espíritu surfero en la capital del surf chileno.

Atardecer Pichilemu

Pichilemu, refugio de surfistas y amantes del mar, esconde rincones donde la naturaleza y la adrenalina se encuentran. Unas vacaciones aquí se erigen como el perfecto andén entre la comodidad y las olas; un lugar donde la vida se mide en mareas y la pasión por el surf se fusiona con el acogedor ambiente local.

Las legendarias playas de Pichilemu, como Punta de Lobos, invitan a surfistas de todas las latitudes a desafiar sus impresionantes olas. Mientras tanto, La Puntilla ofrece un escenario inclusivo para quienes recién comienzan a deslizarse sobre el agua. Estos spots se han convertido en puntos de encuentro donde la cultura del surf vibra con cada ola conquistada.

Finaliza el día recorriendo el paseo marítimo, donde sabores típicos y risas ambientan el atardecer. Entra en sintonía con la vida costera y permite que las cabañas en Pichilemu sean tu refugio personal para vivir una experiencia única en este encantador rincón chileno.

Santiago de Chile 

Un mosaico cosmopolita de cultura, historia y modernidad en el corazón de los Andes.

Catedral Metropolitana

Desde los peatones que empedran su paso por los históricos barrios hasta los rascacielos que rozan el cielo de Santiago, la capital chilena abre sus brazos al visitante argentino en busca de historia y cultura urbanas. Entre plazas que han visto pasar siglos y edificios que cuentan la historia del país hermano, como la imponente Catedral Metropolitana y el emblemático Palacio de La Moneda, Santiago invita a un viaje en el tiempo donde el pasado colonial se entrelaza con la pujanza de la modernidad.

Los barrios Lastarria y Bellas Artes se pintan de colores artísticos, murmurando entre calles y rincones la riqueza del panorama cultural chileno. Visitar el Museo de Bellas Artes y el Centro Gabriela Mistral es adentrarse en el corazón creativo de la nación, ofreciendo un intercambio cultural que resuena con el espíritu bohemio del argentino apasionado por el arte y la expresión.

Y qué sería de un encuentro fraterno sin el deleite de los sabores. La gastronomía santiaguina ofrece un banquete de tradición y vanguardia, donde platillos típicos chilenos como empanadas y anticuchos relatan la historia local en cada bocado. Santiago, con su variedad culinaria, cada barrio y espacio público, es un testimonio vivo de una capital sudamericana que comparte, con orgullo, su esencia con los visitantes trasandinos.

Torres del Paine y Glaciares

El imponente reino de picos afilados y hielos eternos en la Patagonia chilena.

Parque Nacional Torres del Paine

En el vasto y salvaje territorio del sur de Chile, el Parque Nacional Torres del Paine se presenta ante los visitantes argentinos como una obra maestra de la naturaleza, donde las imponentes Torres del Paine se alzan como centinelas de granito en la inmensidad patagónica. Con rutas de trekking que serpentean entre bosques, lagos y glaciares, este destino es una promesa de aventura y serenidad, donde cada sendero revela un paisaje más sorprendente que el anterior.

Desde la emblemática vista del Mirador Las Torres hasta la espectacular ruta W-Trail, el parque invita a los senderistas a sumergirse en su prístina belleza. Y para aquellos buscando un encuentro cercano con los gigantes de hielo, la navegación por el Lago Grey ofrece una perspectiva única de los glaciares, permitiendo presenciar el dramático desprendimiento de los icebergs en las aguas frías y profundas del lago.

Fotógrafos y entusiastas de la naturaleza encontrarán en Torres del Paine un lienzo vivo donde las estampas de montañas escarpadas, glaciares ancestrales y cielos despejados se unen para crear un espectáculo visual sin igual. Para aprovechar al máximo esta experiencia, se sugiere planificar la visita en los meses estivales, de diciembre a marzo, cuando las condiciones climáticas favorecen la exploración de uno de los santuarios naturales más enigmáticos e inspiradores del continente.

Rutas del Vino y Valle del Elqui

Donde la claridad del cielo se une a la tradición del pisco en un valle de energías puras.

Valle del Elqui

El Valle del Elqui, conocido por su cielo estrellado y el aroma de uvas y pisco, es un refugio de serenidad y esplendor astral, escondido en los pliegues del Norte Chico chileno. Este valle no solo cautiva con su manto nocturno ideal para la observación astronómica, sino también con su rich legado vinícola y pisco que transitaron desde Europa para arraigarse en estas tierras fértiles.

Astronomía y viticultura se dan la mano en el Valle del Elqui, donde observatorios como el de Monte Grande permiten vislumbrar universos distantes y bodegas emblemáticas invitan a degustar el líquido arte que es patrimonio de la región. La cultura y la gastronomía se funden, celebrando cada día entre cepas y sabores locales que narran la tradición de un valle bendecido por el sol.

Entre excursiones por la impresionante geografía del valle y catas que enaltecen el paladar, las cabañas en Valle del Elqui ofrecen un rincón de privacidad y confort, perfecto para soñar bajo un dosel de estrellas. La magia del valle reside en su equilibrio perfecto entre aventura y sosiego, desplegando ante el viajero una cálida bienvenida al corazón de Chile, donde los días fluyen al ritmo de la naturaleza y la noche revela sus secretos al ritmo de los cielos.

Desierto de Atacama

Un lienzo de salares y cielos infinitos en el desierto más árido del planeta.

Desierto de Atacama

En la remota y fascinante región norte de Chile, el Desierto de Atacama se extiende con una majestuosidad inigualable, ostentando el título del desierto más seco del mundo. Un destino que seduce a argentinos aventureros con su promesa de paisajes lunares y experiencias inolvidables, Atacama es un viaje a la esencia misma de la naturaleza.

San Pedro de Atacama constituye el núcleo de este rincón mágico, un pueblo que ha sabido preservar el legado de la cultura atacameña en cada rincón. Desde la arquitectura hasta las tradiciones, los viajeros pueden sumergirse en una ancestralidad que resiste el paso del tiempo. Es recomendable perderse entre sus calles de tierra y observar las técnicas artesanales que se mantienen vivas entre sus habitantes.

Atacama invita a descubrir el contraste de sus paisajes: desde el Valle de la Luna con sus dunas que cambian de color con el atardecer, hasta los azules profundos de las Lagunas Miscanti y Miñiques en la Cordillera de los Andes. Las mañanas se visten de vapor con los Géiseres del Tatio y la aventura nunca cesa, ya sea explorando a pie el Valle de la Muerte, pedaleando alrededor de San Pedro o maravillándose con el lúcido cielo nocturno ideal para la astronomía. El Desierto de Atacama es un lienzo de emociones y paisajes, atrayendo a quienes en su vecino país buscan maravillarse con la diversidad chilena en todo su esplendor.

Isla de Pascua

El misterio de los moai y la esencia polinésica en el remoto esplendor del Pacífico.

Isla de Pascua

Rapa Nui, o la Isla de Pascua, se erige como un enigma en el Pacífico Sur, desafiando a los exploradores con la majestuosidad de sus moai. Estas imponentes estatuas han resistido el paso del tiempo y siguen dominando el paisaje, testimonio de una civilización tan misteriosa como innovadora. Para los argentinos en busca de misterio y cultura, Rapa Nui es un destino indispensable.

Este Patrimonio de la Humanidad ofrece una ventana a un pasado lleno de enigmas. Los visitantes pueden caminar por los mismos senderos que los antiguos Rapa Nui, explorando canteras como Rano Raraku y sitios ceremoniales como Orongo. La isla no es solo un museo al aire libre de la habilidad escultórica; es un libro abierto a la complejidad de una sociedad perdida en el tiempo.

El Festival Tapati Rapa Nui es el corazón palpitante de la isla, un evento que irradia la rica herencia cultural de sus pobladores. Desde el crepúsculo matutino en Ahu Tongariki hasta el ocaso en Ahu Tahai, la isla invita a vivir su mística de manera completa. Pasando por playas como Anakena y la contemplación del cráter Rano Kau, cada día en Rapa Nui es una inmersión profunda en la identidad de un lugar que, a pesar de su distancia, toca el alma con su historia y belleza única.

Valparaíso y Viña del Mar

Un dúo costero de bohemia artística y elegancia balnearia en el vibrante litoral chileno.

Chile

Valparaíso, con su aire bohemio que respira arte a cada paso, se despliega sobre cerros vibrantes custodiando un tesoro de colores y expresiones culturales. Ascensores como el de Artillería son cápsulas del tiempo que llevan a miradores con vistas panorámicas de la bahía, mientras que murales y grafitis adornan sus calles, desbordando la pasión artística que define a la ciudad.

La elegancia de Viña del Mar ofrece un contrapunto al espíritu de Valparaíso, con sus parques meticulosamente diseñados y playas concurridas como la de Reñaca. Piezas de la historia Rapa Nui y ejemplares botánicos se encuentran entres sus atracciones como el emblemático Reloj de Flores y el Museo Fonck que impregnan a la ciudad de cultura y legado ancestral.

Juntas, Valparaíso y Viña del Mar crean una sinfonía costera de tradiciones y horizontes océanicos. En el corazón portuario de Valparaíso, la Plaza Sotomayor es sólo un punto de partida hacia una rica oferta cultural que se entrelaza con el espíritu marítimo de Chile, ofreciendo a sus visitantes argentinos panoramas inmisericordes que capturan la esencia del Pacífico.

Frutillar y Puerto Varas: Patrimonio Cultural

Encantadoras ciudades del sur de Chile donde confluyen la herencia cultural germana y los deslumbrantes paisajes lacustres.

Frutillar: Patrimonio Cultural

Frutillar y Puerto Varas son joyas de la Región de Los Lagos en Chile, reflejando un fascinante entrelazado de raíces chilenas y herencia alemana. Cada ciudad, con su distintiva arquitectura colonial y celebraciones tradicionales, invita a una inmersión cultural en un paisaje de ensueño.

En Frutillar, el Teatro del Lago se alza como un faro cultural, atrayendo espectáculos de talla mundial, mientras que el Museo Colonial Alemán abre un portal a la vida de los colonos que moldearon la región. Los visitantes pueden pasear por calles adornadas con encantadoras casas que parecen sacadas de un cuento europeo. En cambio, Puerto Varas fusiona su rico legado con impresionantes vistas naturales, desde sus iglesias patrimoniales, como la del Sagrado Corazón de Jesús, hasta su exquisita oferta gastronómica que deleita con sabores que trazan su linaje europeo.

Más allá de su riqueza cultural, Frutillar y Puerto Varas están engastadas en una geografía espectacular. Los volcanes cercanos y las cascadas del Petrohué agregan un toque majestuoso a la visita, ofreciendo panoramas que cortan el aliento. Estos destinos son esenciales para cualquier argentino interesado en la historia y cultura, proporcionando un marco histórico y natural que solo el sur de Chile puede ofrecer.

Carretera Austral y Parque Nacional Laguna San Rafael

La ruta escénica de la Patagonia chilena que serpentea entre glaciares, fiordos y bosques vírgenes.

Parque Nacional Laguna San Rafael

La Carretera Austral de Chile, un viaje inolvidable por la Patagonia, promete un contacto sin precedentes con la naturaleza más salvaje y primigenia. Aquellos que recorren la Ruta 7 descubrirán paisajes vírgenes, valles escondidos y aventuras en cada recorrido del camino, surcando una de las regiones más remotas del hemisferio sur.

El Parque Nacional Laguna San Rafael, con sus glaciares majestuosos, se alza como una joya en esta ruta, ofreciendo un espectáculo de hielo y aguas turquesas. La Laguna de San Rafael, con su glaciar del mismo nombre, es un punto clave donde se puede vivir la experiencia única de ver de cerca el desprendimiento de enormes bloques de hielo, un fenómeno natural de una belleza incomparable.

La Travesía de las Horquetas invita a los aficionados al trekking argentinos a internarse en 53.5 km de impresionante naturaleza patagónica, desafiando el cuerpo y el espíritu con su terreno intransigente. La Carretera Austral es una promesa de aventura y exploración, que se graba en la memoria de quienes se atreven a viajar por la tierra de contrastes y milenarios hielos de la región de Aysén.

Cajón del Maipo

Aventura y relajación entre las majestuosas cumbres andinas a un paso de Santiago.

Cajón del Maipo

Enclavado en el alma de los Andes y a un suspiro de Santiago, el Cajón del Maipo seduce con su prístina naturaleza y espíritu aventurero. Este destino es un lienzo de ríos serpenteantes y cimas imponentes, perfecto para quienes anhelan explorar los paisajes más auténticos y respirar la tranquilidad que sólo las alturas pueden conferir.

Las aguas celestes del Embalse El Yeso pintan un cuadro serene que llama a ser capturado entre fotografías y momentos de esparcimiento al aire libre. La cultura y gastronomía locales cobran vida en el pueblo de San José de Maipo, donde cada rincón narra la historia de un valle que guarda los secretos de la tierra entre sus montañas y cielos.

Después de un día de andanzas, nada como reposar en una de las acogedoras cabañas en Cajón del Maipo, reencontrándose con el confort rodeados por el abrazo silencioso de la Cordillera. Ya sea sumergiéndose en las termas de Colina, custodiadas por la grandiosidad andina, o buscando aventuras en las rutas hacia el majestuoso Volcán, Cajón del Maipo es la promesa de un refugio idílico para el trotamundos que llevamos dentro.