La Cámara Entrerriana de Turismo (CET) detalló que el corredor turístico del río Uruguay, con unas 17 localidades, concentra el 75% de las más de 54.000 plazas hoteleras que tiene Entre Ríos, a las que se suman una diversidad de campings, parahoteles (hoteles informales) y casas o departamentos de alquiler por día.
Asimismo, indicó a Télam que la provincia detectó este último verano una "muy importante cantidad de excursionistas" que llegan para un evento o conocer una ciudad, y vuelven a sus localidades sin dormir.
Esta costa entrerriana invita a conocer sus atributos naturales, carnavales, y el amor por el agua, en todas sus localidades de norte a sur:
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- Chajarí: A 90 kilómetros de Monte Caseros y unos 185 de Uruguayana (Brasil), propone pesca deportiva, excursiones por el agua y por los naranjales, un complejo termal de siete piscinas con cabañas y camping. Su balneario municipal seduce con sus playas de arena y piedra, en una región repleta de balnearios y canteras para conocer.
- Villa del Rosario: 10 kilómetros al sur de Chajarí, es conocida como el "Pueblo de las Mandarinas". Tiene dos fiestas importantes: en enero, que honra a las corrientes migratorias que recibió y en julio, a esa fruta cítrica. El turismo rural y gastronómico se agregan como actividades infaltables.
- Santa Ana: Frondosos citrus y una diversidad de verdes bordean el camino de entrada a esta ciudad ubicada a 22 kilómetros de Chajarí. El lago Salto Grande, sus playas de arenas blancas y aguas limpias captan los sentidos de sus visitantes. Los recorridos por campos de producción citrícola, el turismo rural y de estancias, sus campings y la gastronomía completan la oferta.
- Federación: al noreste de la provincia, cuenta con la primera perforación termal de la Mesopotamia Argentina, y uno de los parques acuáticos más grandes de Sudamérica, con aguas termales con propiedades terapéuticas que forman parte del Acuífero Guaraní, y piletas de todos los tamaños y edades. La ciudad complementa la propuesta con reservas naturales para hacer caminatas y avistajes, playas, un lago y algo que no muchas ciudades del mundo cuentan: las ruinas de la vieja ciudad.
- Concordia: "Nacemos y crecemos con ese espejo monumental que amamos; está en nuestro ADN", señaló a Télam el intendente, Francisco Azcué. Concordia combina la actividad de una ciudad populosa con la tranquilidad de la naturaleza y la amabilidad de sus habitantes. Es un punto elegido para la pesca deportiva. El lago de Salto Grande llega a ella con playas de piedras y arena. Se suma una reserva natural, tres complejos termales, viñedos, casinos y carnavales, entre otros atractivos y propuestas. El Parque San Carlos funciona como un pulmón verde por su selva en galería y jardín botánico.
- Puerto Yeruá: Considerado un paraje ideal para los que necesitan de la paz de la madre naturaleza, el murmullo constante del río frente a la extensa costa con barrancas, invitan a descansar sobre ese paisaje y guardar las mejores vistas panorámicas a 33 kilómetros de Concordia. Es un lugar predilecto para realizar deportes acuáticos, pesca, senderismo, cabalgatas y caminatas.
- Nueva Escocia: llamado el "Caribe entrerriano" por sus arenas y aguas cristalinas, el sello de seguridad y tranquilidad que lleva en sus campings, playas y ciudadanos, concentra su potencial en hacer relajar al turista.
- Parque El Palmar: sitio Ramsar con importancia y protección internacional, se erige como reservorio de historias y ecosistemas extraordinarios. En sus 8.213 hectáreas confluyen miradores con paisajes y atardeceres únicos, entre arroyos, bosques y selvas a los que se puede llegar en auto, moto o bicicleta (no hay transporte público). "La Calera del Palmar" es uno de los más elegidos. En la zona conviven vestigios de comunidades originarias del 1200, como un cementerio del siglo XVIII; expediciones españolas y asentamientos jesuitas; el paso de Urquiza; una empresa que se instaló en 1955; y el inicio del Parque, en 1966.
- Pueblo Liebig: patrimonio histórico y cultural de Entre Ríos, fue fundado en 1863 a partir de industria frigorífica inglesa que se instaló allí. Conserva construcciones de entonces. Se agregan propuestas de turismo rural, pesca y deportes terrestres, playas y bancos de arena.
- San José: a 9 kilómetros de Colón, se ubica con una de las termas más solicitadas, que además funcionan como "balcón" hacia el río y la costanera. La ciudad "tiene unos 25 atractivos turísticos, recreativos y de historia", relató el intendente, Gustavo Bastián, y recordó que fue la segunda colonia agrícola de inmigrantes del país, después de Esperanza (Santa Fe). El Molino Forclaz invita a recorrer las formas de producción y costumbres de estilo holandés. La ciudad tiene más de 10 paseos, que combinan aspectos históricos, culturales y naturales.
- Colón: es una de las joyas turísticas de la provincia gracias a su hermosura natural, distribuida en 10 kilómetros de playas y un renovado complejo termal muy cerca del Parque Nacional El Palmar. El río brinda es escenario de diversos deportes acuáticos. Las termas disponen de un amplio parque, 13 piscinas, parque acuático y toboganes de hasta 9 metros de altura. La ciudad también alberga turismo rural histórico que sirve para "respirar aire puro, conocer la naturaleza y degustar los sabores de la región", confirman quienes trabajan en el área de Turismo.
- Concepción del Uruguay: la "Histórica" está rodeada de agua, paisajes verdes con un arco iris de aves y animales, que se completa con atractivos de todo tipo. El Palacio San José, a pocos kilómetros del centro, es la exestancia del general Justo José de Urquiza. La ciudad tiene siete monumentos históricos nacionales, entre los que se destaca el Colegio Nacional, el primer colegio laico del país, donde estudiaron expresidentes. La Basílica de la Inmaculada Concepción, en la que descansan los restos de Urquiza; el edificio del Correo -ex residencia del General-; la Plaza General Francisco Ramírez, constituida en Lugar Histórico Nacional al ser el lugar donde Urquiza inició, contra Juan Manuel de Rosas, al proceso que concluyó con la sanción de la Constitución Nacional en 1852, son algunos de los otros puntos recomendados a conocer. Otros atractivos son las playas y balnearios, las termas en un predio de 30 hectáreas, el Mercado "Manos Entrerrianas" y el circuito de boliches y pubs para los más jóvenes.
- Gualeguaychú: a 230 kilómetros de Capital Federal, y siendo es el primer acceso a Uruguay desde el sur, aprovecha su costa sobre dos ríos con arenas blancas para disfrutar de todo tipo de entretenimientos, dentro y fuera del agua. Invita al descanso entre bosques, arroyos, una amplia variedad de balnearios y campings sobre el río Gualeguaychú y el río Uruguay; dos complejos de termas; y un circuito histórico. Su Carnaval es considerado la fiesta a cielo abierto más grande de Argentina, y se desarrolla en el primer Corsódromo del país.
- Villa Paranacito: El turismo es una de las tres principales actividades gracias a la abundante naturaleza, pero también a la rica conservación cultural de los primeros habitantes nativos (pueblos chaná, charrúas y guaraníes, principalmente. La ciudad, aseguran los lugareños, sirve para "bajar el estrés" y realizar alguna actividad en el agua como la pesca, paseos en lanchas y kayaks; recorridos guiados a pie y en bicicleta en las distintas islas; la visita a un monte nativo donde se logra "desenchufar completamente de la rutina", avistaje de aves y playas.
Con información de Télam