El asesinato de Andrés "Pillín" Bracamonte, jefe de la barrabrava de Rosario Central, tras el partido contra San Lorenzo, profundiza la ola de violencia que envuelve las calles de la provincia de Santa Fe. Su muerte no solo conmovió a sus allegados, sino que puso en alerta a las fuerzas de seguridad: todo apunta a un ajuste de cuentas, dado que en los últimos meses había recibido amenazas y en agosto ya habían intentado matarlo.
Este sábado por la noche y luego del encuentro disputado en el Gigante de Arroyito, Bracamonte fue acribilladojunto a su mano derecha Daniel “Rana” Attardo, mientras se encontraban en una camioneta blanca ubicada en las cercanías del estadio. Testigos reportaron entre siete y diez disparos en la zona donde ocurrió el crimen.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó oficialmente este domingo que, de acuerdo a la investigación que desarrolla el fiscal de Homicidios Dolosos, Alejandro Ferlazzo, Attardo conducía una camioneta Chevrolet S10 y Bracamonte iba como acompañante. Ambos fueron interceptados por al menos dos personas que se trasladaban a pie y les realizaron múltiples disparos de arma de fuego, hiriéndolos de gravedad para después darse a la fuga.
Los hombres fueron auxiliados por allegados que se encontraban en la zona y trasladados en vehículos particulares hasta el Hospital Centenario, donde se informó su deceso “a consecuencia de múltiples impactos de disparos de arma de fuego”. El fiscal Ferlazzo dispuso que el gabinete criminalístico releve las cámaras de seguridad públicas y privadas de la zona y tome testimonios a todo aquel que puedan aportar datos relevantes para la investigación.
El jefe de la Policía de Santa Fe, Luis Maldonado, se refirió al crimen de los referentes de la barra auriazul, y aseguró que tienen "que trabajar en esclarecerlo y rápidamente para darle una respuesta a la sociedad". En medio de la escalada de la inseguridad, que mantiene en vilo a la sociedad rosarina, el agente sostuvo que el hecho “es muy reciente y hay aseguramiento de pruebas que se están trabajando desde que llegó el fiscal de homicidios dolosos”.
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Consultado sobre los posibles sucesos violentos que puedan ocurrir en la ciudad tras este crimen, Maldonado sostuvo: “Trabajamos en prevención y en inteligencia criminal. Hay un equipo del Ministerio de Justicia y Seguridad que está trabajando en este momento”. En diálogo con Radio 2, también adelantó que hoy se reunirá con el ministro de Justicia y Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, para analizar el caso.
El líder de la barra brava de Rosario Central contaba con amplios antecedentes que lo relacionan a causas por asociación ilícita, lavado de dinero y la más reciente, por violencia de género. La última acusación se centraba en dos incidentes de amenazas simples denunciados por su ex pareja, que datan de 2018. El primer incidente ocurrió el 27 de marzo de ese año, cuando la víctima intentó terminar la relación. El segundo incidente se registró el 19 de octubre de 2018, también en el domicilio compartido.
Asesinaron a "Pillín"Bracamonte: las múltiples amenazas que había recibido el jefe de la barra de Rosario Central
Según un amigo del barrabrava, “Pillín” Bracamonte fue baleado 30 veces desde su llegada a la barra de Rosario Central. En julio de 2002, lo atacaron en un gimnasio ubicado en la calle Ovidio Lagos al 1000 y recibió tres impactos de bala en el cuerpo. Sufrió heridas en los brazos y el corte de una vena, mientras que el disparo restante se lo dieron en la pierna derecha.
En otra oportunidad, en 2006, fue atacado a tiros por desconocidos en la puerta de la casa de la zona norte rosarina, donde vivía en ese momento. En esa ocasión, recibió cuatro disparos: uno en el abdomen con orificio de salida, uno en cada pierna y otro en el tobillo.
En los últimos años, el poder de Bracamonte empezó a ser cuestionado y también disputado en el Gigante de Arroyito. A lo largo del tiempo, "Pillín" fue perdiendo a sus históricos laderos y otros grupos que querían tomar el poder en la popular canalla le marcaron la cancha. En febrero de 2024, un grupo de desconocidos baleó el frente de Los Álamos Club de Campo, el country de Ibarlucea donde vivía hasta el momento de su muerte. En aquella ocasión, dejaron una nota amenazante para el líder de la barra.
El pasado 10 de agosto, fue blanco de un atentado en el Parque Alem luego del triunfo de Central por 1-0 ante Newell’s. Los atacantes dispararon varios tiros, uno de los cuales rozó su espalda y otro impactó en el brazo derecho de su pareja actual.
De acuerdo a medios locales, este grupo opositor al poderío de Bracamonte también busca dominar la venta de drogas en la zona noroeste de Rosario. En este contexto, el 1.º de octubre fue asesinado Samuel Medina, relacionado con la banda de Los Monos y atacado con 16 disparos tras un partido entre Central y Vélez. En el siguiente encuentro, ante Banfield, se desplegaron banderas en su honor con la frase: “Siempre mono, nunca sapo” y “No respetamos a nadie”.
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