El pasado lunes 26 de abril se cumplieron 31 años del homicidio de Wálter Bulacio a manos de agentes de la policía federal; convirtiéndose este en un caso emblemático de violencia institucional. En aquel momento, el joven de 17 años sufrió la privación de su libertad -a pesar de que la Ley de Patronato de Menores prohíbe la detención de menores sin intervención de un juez competente- cuando asistió a un recital en el Estadio Obras Sanitarias, en abril de 1991. La policía realizó una razzia con detenciones arbitrarias y tras ser torturado murió a los cinco días, en el Sanatorio Mitre, por un traumatismo de cráneo.
La autopsia encontró huellas inequívocas de golpe con objetos contundentes en miembros, torso, cabeza y extremidades. Su caso fue, sin lugar a dudas, emblemático. Y dejó una clara huella que marcó el accionar de los organismos de derechos humanos ante nuevas violencias ejercidas por las fuerzas de seguridad. Tanta importancia tuvo, que llegó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Fue recién el 8 de noviembre de 2013, 22 años después de su muerte, cuando el comisario Miguel Ángel Espósito -responsable del operativo policial realizado el 19 de abril de ese año- fue condenado a la insólita pena de tres años de prisión “en suspenso”. Todavía se encuentra sin cumplimiento efectivo. La condena dictaminada por el Tribunal Oral 29 fue por la detención ilegal. Es decir que los agentes de la comisaría 35 de la Policía Federal nunca fueron juzgados por el ataque que provocó la muerte del adolescente, quien falleció el 26 de abril.
Las marchas y pedidos de justicia por Wálter comenzaron cuando estaba en coma, luchando por su vida. Su familia, amigas y amigos, y compañeros de colegio se autoconvocaron para repudiar la represión y el violento ataque de las fuerzas. En esas marchas nació el popular y reconocido canto: "Yo sabía, yo sabía, que a Bulacio lo mató a la Policía". Dicho lema fue coreado y cantado en cada movilización y recital al que asistían cientos de jóvenes como él.
La senadora provincial por el Frente de Todos (FdT) y Secretaria de Derechos Humanos de la CTA de la Provincia de Buenos Aires, María Reigada, habló sobre la violencia institucional y su erradicación en el marco de un nuevo aniversario de dicho homicidio. "Como sociedad tenemos que involucrarnos en la defensa de la seguridad democrática y tenemos que avanzar en la construcción de un sistema que no persiga a los jóvenes, que no perciba a la pobreza como sinónimo de delincuencia, sino como expresión de la injusticia y de la inequidad", manifestó.
Al mismo tiempo, la actual miembro del Movimiento Mayo -compartido con el diputado nacional Hugo Yasky- sostuvo: "Walter Bulacio, como Lucas Verón o Luciano Arruga, u otros jóvenes, han sido víctimas de la violencia Institucional, del gatillo fácil y de la tortura y esto no lo podemos seguir tolerando en democracia". Mientras que, en relación al Poder Judicial,aseguró que es necesario “trabajar por una justicia democrática, en donde logremos erradicar la violencia Institucional".
Para cerrar, Reigada comentó que "el año pasado los Diputados Nacionales Hugo Yasky y Paula Penacca presentaron un proyecto en el cual se aborda esta problemática y genera distintos instrumentos de control del sistema de seguridad para prevenir y poder erradicar definitivamente la violencia institucional". Mientras que desde sus redes, sentenció: "Walter Bulacio sigue siendo un caso emblemático de la 'suerte' que corren nuestros pibes por los 'excesos' de la policía. Seguimos recordando a Walter y luchando todos los días contra la violencia institucional".
En la misma línea, Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio (H.I.J.O.S) se expresaron en redes sociales recordando su nombre e imagen. "A Bulacio lo mató la policía. Murió hace 31 años, después de las torturas de la Policía Federal en la comisaría 35°, a cargo de Miguel Ángel Espósito, en una razzia en la puerta del recital de Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota en Obras el 19/4/1991", escribieron,
A través de su cuenta oficial de Twitter, Horacio Pietragalla Corti, Secretario de Derechos Humanos de La Nación, también aprovechó la ocasión para recordarlo. "Hoy se cumplen 31 años del asesinato de Walter Bulacio, detenido sin motivos por agentes de la Policía Federal cuando intentaba entrar a un recital. Días después, murió en el hospital con signos de haber sido torturado y golpeado", sostuvo.