Segundo femicidio en Córdoba en menos de 24 horas: asesinó de dos disparos a su pareja y minutos después se entregó

Paulina Silva había presentado una denuncia por violencia de género contra Raúl Cortez el 23 de octubre pasado, pero posteriormente se retractó y negó ser víctima de maltratos. El crimen habría sido presenciado por un nieto de 4 años de la pareja. La Fiscalía imputó al hombre por homicidio calificado por el vínculo, alevosía y por mediar violencia de género

12 de diciembre, 2024 | 16.09

Un segundo femicidio en menos de 24 horas conmocionó a la provincia de Córdoba. Este miércoles, Paulina Isabel Silva, de 53 años, fue asesinada en la localidad de La Para, departamento Río Primero, por su esposo, Raúl José Eugenio Cortez (56), quien posteriormente se presentó en la comisaría local y confesó el crimen. 

La mujer estaba desayunando en su casa, ubicada sobre la calle Buenos Aires al 400 del barrio Mariano Fragueiro, cuando un disparo impactó en su cabeza y la mató en el acto. Minutos más tarde, cerca de las 7 de la mañana, su marido se acercó a la dependencia policial. Un grupo de efectivos se dirigió al domicilio del matrimonio para constatar el hecho y encontraron a Paulina sin vida, sentada a la mesa, con dos disparos en la nuca.

En el domicilio, los efectivos secuestraron una carabina calibre .22, que habría sido utilizada en el hecho. El crimen habría sido presenciado por un nieto de 4 años de la pareja. Así lo aseguró Isabel Silva, prima de la víctima, en declaraciones a El Doce TV. La familiar relató que el niño siguió a su abuelo hasta la comisaría tras el crimen. “El nietito chiquito presenció el caso, dicen los vecinos. Estaban tomando mates. Vi que Raúl iba corriendo y cruzó la ruta, pero nunca pensé que iba a la comisaría”, reveló. 

Según Infobae, Silva había presentado una denuncia por violencia de género el 23 de octubre pasado, pero posteriormente se retractó y negó ser víctima de maltratos. A raíz de esa denuncia, Cortez fue excluido del hogar, aunque ambos continuaron conviviendo pese a la medida judicial.

Se esperan los resultados de la autopsia para confirmar los detalles preliminares. La Fiscalía de Violencia Familiar y de Género del Sexto Turno, a cargo del fiscal Pablo Cuenca Tagle, imputó al hombre por homicidio calificado por el vínculo, alevosía y por mediar violencia de género, y será indagado en las próximas horas.

Mientras el Observatorio "Ahora Que Sí Nos Ven" advirtió que hubo un femicidio cada 35 horas y se contabilizan más de 225 asesinatos por la violencia de género en la Argentina durante los 11 meses del 2024, las autoridades de Córdoba siguen de cerca este nuevo caso fatal.

Córdoba: pese a botón antipánico y la consigna policial, una mujer fue asesinada por su expareja

Este martes, Jésica Domínguez (35) fue asesinada por las agresiones de su expareja, Ezequiel Alfonso Suárez (36). El hecho ocurrió alrededor del mediodía, cuando el hombre violó una orden de restricción impuesta por la Justicia y mató a la mujer en barrio Villa Boedo, en la capital provincial. 

De acuerdo con la investigación, una adolescente de 13 años llegó a su casa, en calle Medrado al 5800 y vio a su madre sin vida y a su padre, herido e inconsciente. Al llegar, los agentes y un servicio de emergencias constataron el fallecimiento de la mujer, quien presentaba diversas heridas de arma de fuego.

Se cree que el hombre ingresó por la parte trasera del domicilio y, de esa manera, habría saltado la consigna policial. Tras cometer el crimen, Suárez habría intentado quitarse la vida, pero las autoridades intervinieron. Ahora permanece internado y con custodia policial en el Hospital de Urgencias.

Según información que figura en la causa, la pareja estaba separada desde hace un tiempo. Domínguez lo denunció en 2022, en 2023 y dos veces en 2024. Suárez estaba acusado por daño, amenazas, privación ilegítima de la libertad y desobediencia a la autoridad en un contexto de violencia de género. Además, regía una medida cautelar de restricción y la víctima contaba con un botón antipánico, que no alcanzó a activar antes del ataque