Buscan extender las grúas a toda la Ciudad: en 2019 ganaron más de $250 millones

El año pasado, las dos empresas que operan con concesión vencida hace dos décadas ganaron $600.000 por día. En 2020 el ingreso diario subió casi en $200 mil.

09 de noviembre, 2020 | 17.32

El gobierno porteño presentó un proyecto de ley para ordenar el espacio público mediante la extensión, por ejemplo, del sistema de grúas de acarreo a los distintos barrios de la Ciudad, no sólo en algunos como hasta ahora, con la "colaboración" de los vecinos que podrán denunciar malos estacionamientos. El texto habilita el llamado a una licitación para dividir el territorio y entregar la operación de cada sector a empresas diferentes. Hoy hay dos, Dakota-STO y BRD-SEC, que operan con sus concesiones vencidas desde hace casi 20 años y cuyos contratos se fueron prorrogando con el tiempo. Entre ambas, por día generaron $600.000 de ingresos en 2019, más de $250 millones al año y sólo pagaron a la Capital Federal $55.000 cada una, por mes, en concepto de canon. Negocio redondo que aumentó este año porque el acarreo pasó de $1.800 a $3.000.

Hagamos cuentas. Según datos del gobierno porteño, requeridos por El Destape mediante un pedido de acceso a la información pública, en 2019 las empresas acarrearon un promedio de 385 vehículos por día. En ese entonces, su costo era de $1.800. Hablamos de $693.000 diarios sólo en llevarse autos. O sea, $21.483.000 al mes, si el mes del que hablamos tiene 31 días. O $252.945.000 al año, si no es bisiesto. Son unos $13.383 salarios mínimos si tomamos el número anual. También pueden ser casi dos millones y medio de kilos de pan, si tomamos su valor a $103 el kilo. Hablamos de un montón de plata.

Si hablamos de un montón de plata, podemos pensar que gran parte de ese dinero vuelve al Estado porteño en concepto de canon. Sin embargo eso no es así. Según confirmaron desde el Ministerio de Transporte porteño, cada una de las compañías abona $55.000 mensuales al Estado. Unos $100.000 en total si lo hacemos redondo. Un sexto de lo que ganan sólo en un día. 

Con la pandemia, el uso del auto se volvió esencial y casi obligatorio porque el transporte público está destinado sólo a los esenciales. Si bien se concedieron más permisos para estacionar en distintos puntos de la Ciudad, las grúas volvieron a funcionar y, según pudo saber este medio, este año se levantan alrededor de 270 vehículos por día. La diferencia es que el acarreo ya no cuesta $1.800 sino $3.000, por lo que la ganancia por jornada aumentó a $810.000. Más redondo todavía.

Desde el gobierno porteño explicaron que en 2019 las actas por estacionamiento indebido ocuparon el segundo lugar en el ranking de las infracciones más comunes en la Ciudad de Buenos Aires, representando el 32% de las totales.

Según los datos oficiales, actualmente hay cuatro mil espacios tarifados y se aspira aumentar el número a 80 mil; hay 239 parquímetros que apuntan a digitalizar; el pago del cospel pasará a ser por Whatsapp o plataformas; hay dos zonas de acarreo y buscan subirlas a tres, además de pasar de dos operadores a tres que se dividirán los espacios. 

También apuntan a pasar de tres a seis playas de acarreo, de 30 a 60 grúas para llevar autos; generar dos licitaciones para regularizar un contrato vencido hace 20 años (por un lado las grúas y por otro el sistema de pagos); generar múltiples tipos de tarifas en lugar de sólo una y que los residentes no paguen dentro de un radio establecido cercano a su domicilio.

El nuevo proyecto

El Gobierno envió un proyecto a la Legislatura porteña la semana pasada y busca modificar otro presentado en 2011 por "uno más moderno y sustentable" con un sistema que "será 100% digital, se podrá gestionar a través de Boti, las grúas estarán al servicio de los vecinos y su implementación será por etapas. Los residentes no pagarán en un radio de hasta 300 metros de su domicilio". Según detallaron desde la gestión Cambiemos, no se requerirá parquímetros sino que todo se podrá hacer vía digital y marcará un cambio en la operación de grúas "que estarán al servicio de los vecinos". Los datos oficiales dicen que "sólo en 2020 hubo más de 77 mil notificaciones de vecinos por autos mal estacionados que afectaban la convivencia vial y en la mayoría el servicio de acarreo actual no tuvo capacidad para resolverlas".

“Este proyecto tiene como objetivo que la gente transite de manera ordenada y segura y que adaptemos el estacionamiento a la nueva realidad de la Ciudad. Desde ya que nadie va a pagar por dejar el auto en la puerta de su casa. Planteamos una alternativa a un problema que nos traen muchos vecinos y que afecta a nuestra convivencia y a la seguridad de los que vamos por la calle: los autos mal estacionados, en entradas de garage o en rampas. Con un sistema de pago electrónico sin parquímetros, avanzamos hacia una Ciudad cada vez más moderna y cómoda para la gente”, dijo Felipe Miguel, jefe de Gabinete porteño.

“En esta nueva etapa los vecinos serán quienes prioricen la operación de las grúas en situaciones que afecten la convivencia vial —como bloqueos de rampas y cocheras— y los residentes seguirán estacionando en forma gratuita. Queremos darle a la ciudad de Buenos Aires un sistema de estacionamiento moderno, que tenga en cuenta la problemática de cada barrio y se adapte a los tiempos actuales eliminando los parquímetros y los cospeles”, explicó Juan José Méndez, secretario de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad.

Desde la oposición no se vieron tan optimistas. El legislador porteño Matías Barroetaveña, del Frente de Todos, aseguró que se trata de "una nueva estafa" con un "mero afán recaudatorio" y que "llevar grúas a todos los barrios es la extensión de la concesión más escandalosa de la historia de la ciudad, que desde 1990 tiene dos empresas que recaudan 12,5 millones de pesos por mes pagando un canon irrisorio de 55 mil pesos”-

“Lo que la ciudad necesita para desincentivar el uso de vehículos particulares es extender la red de subte, sin embargo, todos los planes de expansión están paralizadas”, manifestó Barroetaveña; y agregó que “desde el Frente de Todos proponemos el llamado a una consulta popular para que los vecinos de la ciudad decidan sobre el futuro del estacionamiento medido.”

Su compañero de bloque, Santiago Roberto, denunció ante El Destape que "lo único que le preocupa al gobierno porteño es recaudar. Ya no le alcanza con vender las tierras públicas, ahora van a privatizar las calles. Quieren llevar el estacionamiento tarifado a la mayoría de los barrios y que el sistema de acarreo sea en toda la ciudad. Nosotros habíamos anticipado esta intención del Ejecutivo porteño".

El legislador presentó en marzo un proyecto de ley para que los vecinos "decidan a través de un referéndum obligatorio y vinculante si están de acuerdo con la ampliación del estacionamiento medido que impulsa Larreta. Estas políticas van en contra de los intereses de las y los porteños que están atravesando una crisis económica y necesitan recibir ayuda del gobierno, que en lugar de darles un alivio les da un golpe al bolsillo".

 

Las claves del proyecto

1) El Poder Ejecutivo o el organismo designado podrá llamar a licitación pública para contratar la prestación del servicio de grúas por un máximo de 10 años. Algo que sumará a nuevas empresas y podría regularizar la situación de las que funcionan hace años de manera irregular. La Ciudad se dividirá en tres zonas que contarán como mínimo con una playa para ubicar el vehículo acarreado. Los predios serán definidos por el Gobierno y su afectación será por un plazo máximo de cinco años.

2) Los vehículos podrán ser acarreados si incumplen las normas generales, obstruyen vías rápidas, están abandonados, cuando se sufrió un accidente vial que entorpezca la circulación (sin costo), cuando esté mal estacionado,  pero en ningún caso podrá acarrearse un vehículo con personas en su interior al momento del inicio de la remoción.

3) Si pasaron 15 días desde que el vehículo fue acarreado, permanece en la playa de estacionamiento y nadie lo retiró, será considerado abandonado y podrá ser trasladado a otra playa. Esto le será notificado al dueño para que lo pueda ir a buscar.

4) Habrá tarifas sencillas por hora de estacionamiento, según el horario; otras progresivas a medida que pasa el tiempo, sobre todo en sectores de alta circulación; los residentes no deberán pagar las sencillas, progresivas 2 o especial y tendrán un descuento en las progresivas tipo 1; habrá una tarifa especial que se aplica a eventos con convocatorias masivas; una tarifa nocturna (entre las 20 y las 8 de la mañana) en sectores determinados; zonas no tarifadas para los lugares de baja demanda o con espacio libre suficiente.

5) Se admitirá el pago mediante aplicaciones instaladas en teléfonos celulares y/o dispositivos móviles y/o a través de Internet. A través del sistema Boti, el vecino podrá cargar su patente para generar el pago del estacionamiento a través de plataformas de terceros; podrá consultar los espacios a 300 metros donde puede estacionar gratis por ser residente; y realizar la denuncia de los vehículos mal estacionados para solicitar el servicio de grúa para su remoción.

6) Actualmente el sistema de acarreo se concentra en microcentro, Recoleta y Palermo pero buscan abarcar el 100% de la Ciudad.

7) Los vecinos podrán llamar para remover autos que generen problemas de convivencia como puede ser bloquear una rampa y la entrada de un garage.

8) Los vecinos residentes no pagarán en un radio de 300 metros de su vivienda.

9) Los comercios podrán vender “horas de estacionamiento” obteniendo comisiones por este servicio.