Un terremoto, cuya máxima magnitud fue de 7,5 grados Y 63 kilómetros de profundidad, afectó a la provincia de Surigao del Sur, en la isla de Mindanao, en el sur de Filipinas, según informó la Agencia Sismológica de dicho país (Phivolcs) y anunció que rige un alerta de tsunami en la zona. Por su parte, servicios de prevención de países como Chile, Estados Unidos -lo situó en magnitud 7,6 y 32 kilómetros- y Japón también se refirieron al fenómeno meteorológico que puede generar réplicas.
De acuerdo con Phivolcs, el terremoto se produjo a última hora del sábado y provocó órdenes de evacuación en algunas zonas del país y en las costas del suroeste de Japón, a causa de las repetidas advertencias de olas de tsunami de un metro o más. Por su parte, indicaron que las olas podrían llegar a Filipinas a medianoche y continuar durante horas aunque no había informes iniciales de daños significativos a esa hora.
Por otro lado, el Sistema de Alerta de Tsunamis de Estados Unidos manifestó que podría haber olas de hasta 3 metros por encima del nivel habitual de la marea alta en algunas costas filipinas pero, posteriormente, informó que ya no había riesgo de tsunami. "Basándose en todos los datos disponibles (...) la amenaza de tsunami de este terremoto ya ha pasado", manifestaron.
De todas maneras, Phivolcs dijo a las personas cerca de las costas de Surigao del Sur y Davao Oriental que debían evacuar inmediatamente o "trasladarse más al interior"; mientras que las embarcaciones en el mar, durante dicho período, "deberán permanecer en aguas profundas hasta que se les avise". Ambas provincias son zonas rurales y no están densamente pobladas.
El jefe de la policía local de la ciudad costera de Hinatuan, cercana al epicentro del sismo, Raymark Gentallan, y con más de 44 mil habitantes, anunció el corte de suministro eléctrico aunque no informaron daños o víctimas por la catástrofe.
Desde la cadena japonesa NHK advirtieron que se esperaba que olas de tsunami de hasta un metro alcanzaran la costa suroeste de dicho país durante las primeras horas de la madrugada del domingo; mientras que Phivolcs advirtió de réplicas aunque no esperan "daños significativos". La zona ya ha sufrido más de una docena de réplicas, la mayor de magnitud 6,4, según el Centro Sismológico Europeo-Mediterráneo (EMSC). En tanto, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) descartó la posibilidad de amenaza de tsunami para las costas de Chile.