Principales teatros de Buenos Aires: ¿los conocés?

09 de mayo, 2022 | 14.43

La ciudad respira teatro. De eso no hay dudas. Entre el circuito comercial, independiente y oficial, los teatros de Buenos Aires son más de 300. Por eso puede compararse a las grandes capitales culturales, como Nueva York, París o Londres.

Con sus numerosas salas, la movida teatral en la Ciudad no tiene descanso. Su vastísima oferta de espectáculos comprende los más diversos géneros. Constantemente se estrenan obras de producción local, incluso se recrean shows extranjeros y otros éxitos de lo más variados.

En este artículo vamos a conocer la historia de algunos de los más importantes teatros de Buenos Aires. Además, te contamos sobre la importancia del arte escénico en la ciudad y el país. Ahora sí, ¡qué se levante el telón!

Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Primeros teatros de Buenos Aires: historia breve

El teatro desembarca en Buenos Aires en 1757. La primera sala fue el Teatro de Óperas y Comedias, ubicado en la actual calle Alsina (entre Defensa y Bolívar). Allí se representaban desde obras de marionetas hasta óperas.

Este primer intento de dar vida al arte dramático en la Ciudad durará apenas hasta octubre de 1761. En ese momento la sala fue clausurada por orden del obispo de la diócesis de Buenos Aires.

En noviembre de 1783 se inaugura la Casa de Comedias, teatro al que popularmente se denominó La Ranchería. Era un galpón con techo de paja y paredes de ladrillo asentado en barro. Su escenario no era muy alto.

La Ranchería funcionó durante nueve años. Su final se debió a un voraz incendio causado por un cohete que impactó en el techo de paja del teatro.

Recién para mayo de 1804, durante el virreinato de Sobremonte, se abrió el Coliseo. Se lo llamó Provisional porque se había proyectado uno definitivo, que nunca llegó a construirse. Con estas primeras salas se dio inicio a una larga y rica historia, la del teatro argentino.

Conocé la historia de los teatros de Buenos Aires

Teatro Gran Rex

El Gran Rex es uno de los principales teatros de Buenos Aires. Posee capacidad para 3.262 espectadores, por lo que es uno de los mayores de Sudamérica y el mundo. Está ubicado en la Avenida Corrientes, a menos de 200 metros del Obelisco.

El edificio fue terminado en 1937, luego de apenas seis meses de construcción. Este exponente del estilo arquitectónico racionalista es un diseño del arquitecto Alberto Prebisch. Se trata del mismo profesional que creó el Obelisco.

El imponente Teatro Gran Rex exhibe una fachada de gran volumen con superficie vidriada. A través de ella se pueden ver desde la vereda los interiores del edificio. La sala es una gran cáscara dividida en fajas encimadas, que se inspiró en el Radio City de New York. 

Metropolitan Sura

El Teatro Metropolitan Sura es uno de los principales teatros de la Avenida Corrientes. El edificio fue diseñado por los ingenieros civiles Germán y J.B. Joselevich, E. Ramírez y Rafael Abril.

La construcción se inauguró en 1937 y muestra el estilo art decó característico de su época. En su fachada sobresale su alta torre escalonada, que le otorga una silueta perfectamente distinguible a la distancia.

En sus inicios se llamaba Cine-Teatro Metropolitan. Tenía, como era costumbre por esos años, una única sala dividida en dos niveles. Entre la platea y su bandeja superior sumaban 2000 butacas.

Más tarde, la sala sería dividida, como sucedió con muchos cines y teatros de Buenos Aires. En la actualidad cuenta con dos salas, una de 860 butacas y la restante con 598 localidades.

Teatro General San Martín

Otro de los espacios culturales más importantes de la Ciudad es el tradicional Teatro General San Martín. Localizado en el corazón de la ciudad, en plena Avenida Corrientes, el Teatro San Martín es visitado cada año por cerca de un millón de personas.

Este espacio hoy clásico fue inaugurado en 1960. Sus instalaciones ocupan una superficie cubierta de 30.000m². Allí se encuentran tres salas teatrales y un cine donde se realizan ciclos de películas ajenas al circuito comercial. También hay varios salones para exposiciones y una fotogalería.

La sala más grande del Teatro San Martín es la Martín Coronado, nombrada en honor a uno de los pioneros de la dramaturgia argentina. Esta sala posee una capacidad para 1049 espectadores.

El Teatro General San Martín es además sede de la compañía estable de Ballet Contemporáneo y del mundialmente reconocido Grupo de Titiriteros. Aquí también funcionan los talleres de Danza Contemporánea y Taller-Escuela de Titiriteros.

Teatro Colón

Con más de un siglo de existencia, el Teatro Colón es considerado hoy como una de las 5 mejores salas líricas del mundo. Gracias a este reconocimiento, el principal teatro del país está a la altura de la Ópera Garnier de París, La Scala de Milán y el Royal Opera House de Londres.

De acuerdo a los grandes directores de orquesta, el Colón es uno de los mejores teatros de su tipo por su sala en herradura. Este espacio genera una distribución única del sonido.

Los tres pisos de palcos también poseen una óptima absorción, gracias a sus materiales blandos como telas, maderas y alfombras. Asimismo, en los pisos superiores, se usaron materiales duros como mármol y bronce para optimizar la reflexión de las ondas. 

La construcción del Teatro Colón duró casi 20 años y de ella participaron cerca de 1.500 personas. La obra estuvo a cargo de los arquitectos Francesco Tamburini, Victor Meano y Jules Dormal. Respecto a sus creadores existe una oscura historia. ¿Querés conocerla? Ahora te contamos.

El italiano Tamburini fue el primer encargado de diseñar el proyecto del Colón, pero falleció antes del inicio de las obras. Lo sucedió su compatriota Víctor Meano, quien también murió previo a la inauguración.

Ambos arquitectos tenían algo en común, además de compartir el país de origen y la desgracia de no haber completado su trabajo. Los dos murieron a los 44 años. Por esa época, la gente hablaba de “la maldición del Colón”. La cúpula del Colón fue decorada por el pintor argentino Raúl Soldi, cuyo trabajo le tomó 41 días.

La primera función del Teatro Colón tuvo lugar el 25 de mayo de 1908. En esa oportunidad se presentó la ópera Aída, de Giuseppe Verdi.

En el Colón actuaron los directores, cantantes y bailarines más importantes del siglo XX. Figuras de la talla de Igor Stravinsky, Herbert von Karajan, Luciano Pavarotti, Daniel Barenboim, Maria Callas, Rudolf Nureyev, Plácido Domingo, Julio Bocca y Paloma Herrera.

Lola Membrives

Uno de los más tradicionales teatros de Buenos Aires y la Avenida Corrientes es el Lola Membrives. Se trata de un edificio de planta baja y un piso superior, con una sala en herradura y tres bandejas de palcos.

La fachada del teatro es de estilo neorrenacentista italiano. Posee ventanas con arcos de medio punto, decoradas con coloridos vitrales. La sala cuenta con una cúpula iluminada, y destaca el color rojo intenso de sus asientos.

En el sitio del actual Lola Membrives se había construido el Teatro Smart Palace en 1914. Reformado en 1921, luego se trasladó a la vereda opuesta (actual Multiteatro). El viejo Smart Palace quedó cerrado, hasta que fue comprado y remodelado por el ingeniero civil Enquin. El 6 de junio de 1927 se inauguró con el nombre de Cómico.

En 1936, el Teatro Cómico cambió de manos nuevamente. Lo compró Juan Reforzo, esposo de la actriz Lola Membrives. En 1943, Membrives tomó las riendas del establecimiento y allí estrenó de ahí en adelante sus obras.

Pero Membrives se exilió en España en 1956, hostigada por simpatizar con el derrocado Perón. Cuando volvió al país, siguieron las temporadas de éxito para el teatro. En 1967 debutó la compañía de Ana María Campoy y José Cibrián.

En octubre de 1977, el Teatro Cómico fue comprado por los industriales Carlos y Lorenzo Spadone. Al año siguiente, los nuevos dueños le pusieron el actual nombre de Lola Membrives.

Pasaron por el escenario de este espacio grandes estrellas. Entre ellas, además de Lola Membrives, podemos mencionar a Eva Franco, Tita Merello, Eva Duarte, Miguel de Molina, Niní Marshall, Mirtha Legrand, Sergio Renán y Libertad Lamarque.

 

Ópera

El Teatro Ópera está ubicado en Avenida Corrientes 860. Allí actuaron Édith Piaf, Ava Gardner, el Folies Bergère, Mina Mazzini, el Lido de París, entre otros artistas internacionales, así como reconocidos artistas locales.

En el Teatro Ópera actuaron artistas internacionales de la talla de Édith Piaf, Ava Gardner, el Folies Bergère y Mina Mazzini.

 

El origen de este teatro data de 1870. En ese momento, el empresario Antonio Pestalardo pronosticó que Corrientes -por entonces una calle angosta y alejada del centro- cobraría vida con la instalación de teatros. 

El proyecto de Pestalardo tuvo muchos inconvenientes, ya que al año siguiente estalló la epidemia de fiebre amarilla. Incluso fue cerrado el puerto de la ciudad, lo que trabó la entrada de materiales que necesitaba la construcción.

Finalmente, Pestalardo logró su objetivo y así surgió el “Teatro de la Ópera”.​ En sus inicios se dedicaba al género lírico. Fue inaugurado el 25 de mayo de 1872 con la ópera “Il Trovatore”. 

El actual edificio del Teatro Ópera fue inaugurado en 1935. El diseño estuvo a cargo del arquitecto belga Alberto Bourdon. Posee una característica fachada art déco, inspirada en el Cine Rex de París.

La sala teatral cuenta con capacidad para 2500 espectadores. Su escenario es apto para diversos espectáculos y también posee una pantalla de cine de grandes dimensiones.

Teatro Nacional Cervantes

El Teatro Nacional Cervantes es una de las principales salas del país. Ubicado en la esquina de la avenida Córdoba y Libertad, posee una marcada impronta española. Se trata de una de las joyas arquitectónicas de la Ciudad de Buenos Aires.

La inauguración del Cervantes fue el 5 de septiembre de 1921. Significó un gran acontecimiento cultural y social para la Buenos Aires de principios de siglo. Esta sala fue posible gracias a la actriz española María Guerrero y su esposo Fernando Díaz de Mendoza. Ellos empeñaron su fortuna para concretar el proyecto.

La inauguración del Teatro Nacional Cervantes, en 1921, fue un importante acontecimiento cultural y social en la Buenos Aires de esa época.

 

El propio rey de España, Alfonso XIII, se involucró en la construcción. María Guerrero logró comprometerlo para que el Cervantes fuera una obra de toda España. El rey ordenó que los buques españoles que llegaran a Buenos Aires transportaran los elementos indispensables para el teatro.

La fachada del edificio reproduce los detalles de la Universidad de Alcalá de Henares, de estilo renacentista. La construcción del Cervantes demandó el trabajo de 700 personas, entre operarios y artistas.

Cinco años después de su inauguración, debido a los altos costos de mantenimiento, el matrimonio Guerrero-Díaz de Mendoza decidió rematar el edificio. Diferentes personalidades del arte y la cultura evitaron la subasta y el Cervantes fue adquirido por el Estado.

En 1961 un incendio destruyó parte de las instalaciones del Cervantes. Las obras de reconstrucción demoraron siete años. El Teatro reabrió sus puertas en 1968 y fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1995.

En la actualidad, funciona en el Cervantes el Instituto Nacional de Estudios Teatrales. También es sede del museo del Teatro Cervantes, un archivo teatral y una biblioteca especializada.

Teatros del circuito independiente

El circuito independiente presenta obras de vanguardia, realizadas con muy bajos presupuestos, por artistas tanto emergentes como consagrados. Las entradas suelen ser accesibles o a voluntad. 

Los teatros de Buenos Aires que corresponden al circuito independiente suelen ser salas pequeñas. Se encuentran mayormente distribuidos en los barrios de San Telmo, Palermo y en las inmediaciones del Abasto.

Las salas independientes más reconocidas son:

  • El Teatro Beckett.

  • Callejón de los deseos.

  • El camarín de las musas

  • Abasto Social Club.

  • Espacio Callejón.

  • La carbonera.

  • Chacarerean Theatre.

  • Centro Cultural de la Cooperación, entre otros.

Importancia del teatro en Argentina

El teatro argentino representa una marca de identidad cultural que comprende gran parte del país. Se identificó tempranamente con expresiones como el sainete, la pieza cómica, el grotesco y la revista criolla. Otras variedades dramáticas fundamentales fueron el radioteatro y el teleteatro.

Las primeras variedades teatrales que triunfaron en nuestro país fueron el sainete, la pieza cómica, el grotesco y la revista criolla.

 

El teatro nacional ha respondido desde sus inicios a la demanda de su heterogéneo público. La escena cuenta con innumerables salas comerciales e independientes. También existen actores, dramaturgos y directores formados en escuelas de todas las corrientes escénicas. Ellos mantienen nuestro teatro vigente y en constante evolución.

Conclusión

Debido al fenómeno de concentración urbana que afecta a la Argentina, gran parte de la actividad teatral nacional se concentra en la Capital Federal. El eje de la actividad teatral de la ciudad es la avenida Corrientes. Allí se sitúan muchos de los teatros y salas más importantes.

Algunos de los teatros de Buenos Aires están entre los más importantes del mundo. Este es el caso del Teatro Colón, una de las mejores salas líricas del planeta. La ciudad también tiene el récord de contar con unas 400 obras en cartel en temporada.

En estas líneas conociste parte de la rica historia y tradición de los principales teatros de Buenos Aires. Si querés descubrir más contenido de cultura e interés general, seguí leyendo El Destape.