Dos jugadores cumplieron su promesa con la Difunta Correa tras el "milagro"

Su equipo tenía que dar vuelta un difícil resultado y lograron pasar a la final. Qué jugadores de fútbol fueron a ver a la Difunta Correa.

08 de diciembre, 2024 | 17.13

En la antesala a la final por el último ascenso a la primera división del fútbol argentino, dos jugadores visitaron el altar de la Difunta Correa para cumplir una promesa tras dar vuelta el resultado y pasar de fase en el Reducido.

Esta "Santa Popular" es una de las figuras más veneradas en el país, y miles de fieles todos los años van a pedir por "milagros" o agradecer por los deseos concedidos. 

Se trata de Ezequiel Montagna y Tomás Escalante, dos de los jugadores de San Martín de San Juan que luego de perder 2-1 con Nueva Chicago en la semifinal del Reducido de la Primera Nacional, logró imponerse 1-0 en casa y avanzar gracias a la ventaja por haber hecho mejor ronda regular.

Esto no es algo nuevo, ya que ambos integrantes del plantel que dirige Raul Antuña comenzaron con este ritual luego de la victoria ante Gimnasia y Tiro de Salta en la primera fase de los mano a mano. Tras cada ronda que el equipo avanzó, Montagna y Escalante, visitaron el altar de la Santa Popular en San Juan para agradecerle por la victoria.

Este no es el único caso dentro del plantel del Santo Sanjuanino que demuestra devoción por la Difunta Correa, en la antesala a la vuelta del partido contra Nueva ChicagoSantiago López García fue a visitar el altar para pedirle a la santa el triunfo de su equipo.

El volante compartió en su Instagram una foto en la que se lo ve colgando sus botines en el techo de las escaleras del Paraje junto a dos emojis: un corazón rojo y una manito con dedos cruzados. Finalmente con gol de Montagna el equipo de San Juan logró la victoria.

¿Quién fue la Difunta Correa?

Deolinda Correa, más conocida como la Difunta Correa, es una figura que se ha ganado un lugar en la historia y la religiosidad popular de Argentina. Nacida durante las Guerras de Independencia, Deolinda vivió en una época de conflictos y agitación. Su marido, Clemente Bustos, fue reclutado forzosamente durante las guerras civiles, y ella, decidida a seguirlo, emprendió un viaje llevando en brazos a su hijo pequeño.

Desafortunadamente, Deolinda murió de deshidratación a mitad de camino, pero cuando arrieros la encontraron unos arrieros, su hijo seguía vivo, alimentándose de su pecho. Este hecho se considera el primer milagro atribuido a ella y marcó el inicio de su devoción. La historia de la Difunta Correa es una mezcla de leyenda y fe, de sacrificio y milagros. Los devotos creen que ella realiza milagros e intercede por los vivos, y es por eso que su santuario en Vallecito, San Juan, se ha convertido en un lugar de peregrinación masiva.

Quién fue la Difunta Correa