La Organización Mundial de la Salud (OMS) se mantiene en alerta tras la confirmación de una gran cantidad de casos de viruela del mono durante las últimas semanas en diferentes países de Europa, América y Oceanía. España, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Australia son algunos de los mencionados; mientras que Argentina confirmó ya dos casos de la enfermedad en el país.
Si bien no quieren que la población entre "en pánico", la jefa de preparación y prevención de epidemias y pandemias del organismo, Sylvie Briand, dijo: "No sabemos si solo estamos viendo la punta del icberg". Los estudios indican que el virus no cambió ni mutó por lo que, según la especialista, es posible detener la propagación.
En medio de dichas investigaciones, expertas y expertos están intentando determinar las causas de la "situación inusual" relacionada a la viruela del mono. Mientras que indicó: "Tenemos una buena oportunidad para detener la transmisión ahora. Si ponemos en marcha las medidas adecuadas, probablemente podamos contener esto fácilmente".
Es importante remarcar que la viruela de mono es endémica en once países del este y centro de África pero en las últimas semanas se registraron casos en más de otros 20 países. Dicha enfermedad pertenece a la "misma familia" que la ya conocida viruela, erradicada en 1980. De todas formas es clave destacar que es mucho menos grave y tiene una tasa de mortalidad de entre el 3% y el 6%; mientras que, dependiendo del caso, la persona infectada se recupera en tres o cuatro semanas.
Por otro lado, las y los especialistas subrayan que aunque el virus pueda ser contraído durante el acto sexual, no es una enfermedad netamente transmitida sexualmente. Para que pase de una persona a la otra necesita de un contacto estrecho y prolongado, a través de la saliva o el pus de las lesiones cutáneas surgidas durante la infección.
A su vez, la OMS aclaró que "no existen muchas posibilidades de tratamiento" pero sí destacó que existen antivirales contra la viruela que funcionan para combatirla. Además, se comprobó que las diferentes vacunas desarrolladas para la viruela común también son eficaces en un 85% para prevenir a la viruela de mono.
Argentina registró el segundo caso de viruela del mono
La confirmación llegó desde el Ministerio de Salud de la Nación, luego de que la persona diera positivo en el PCR llevado a cabo en el Instituto Malbrán. "Confirma la infección con poxvirus pertenecientes al grupo eurasiático-africano del género Orthopox", señaló la cartera sanitaria que lidera Carla Vizzotti.
Según informaron, se trata de un residente en España que se encuentra de visita en la provincia de Buenos Aires y que no tiene ningún nexo con el primer caso registrado hace unos días. Dicha persona presenta lesiones ulcerosas, sin otra sintomatología asociada y se encuentra en buen estado de salud, aislado y en tratamiento. Como ocurre en estas ocasiones, sus contactos estrechos también se encuentran en seguimiento clínico.
Según la agencia sanitaria de la Unión Europea (UE), el mundo ya superó los 200 casos confirmados de la viruela del mono -sin contar los países donde la enfermedad es endémica-.
Cuáles son los síntomas y cómo se contagia
Los síntomas de la viruela del mono son fiebre, una erupción característica extensa y, por lo general, ganglios linfáticos inflamados. El período de incubación puede oscilar entre 5 y 21 días. La etapa febril de la enfermedad generalmente dura de 1 a 3 días con síntomas que incluyen fiebre, dolor de cabeza intenso, linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos), dolor de espalda, mialgia (dolor muscular) y astenia intensa (falta de energía).
Dicha etapa es seguida por la etapa de erupción cutánea, que dura de 2 a 4 semanas. Las lesiones evolucionan de máculas (lesiones con una base plana) a pápulas (lesiones firmes y dolorosas) a vesículas (llenas de líquido transparente) a pústulas (llenas de pus), seguidas de costras.
La transmisión entre humanos ocurre principalmente a través de gotitas respiratorias grandes. Como las gotas no pueden viajar muy lejos, se necesita un contacto cara a cara prolongado. Además, el virus también puede ingresar al cuerpo a través de fluidos corporales, material lesionado o contacto indirecto con material lesionado.