Qué es la narcolepsia: síntomas y tratamiento

La narcolepsia es conocida como uno de los principales trastornos del sueño, junto con la apnea obstructiva crónica, el síndrome de piernas inquietas y el insomnio. Esta es una enfermedad que puede incapacitar a las personas que la padecen y es también difícil de diagnosticar.

La falta de información al respecto de la narcolepsia hace difícil saber qué la ocasiona o cómo curarla. En este artículo te diremos todo acerca de este trastorno del sueño que afecta a una de cada 2.000 personas.

En este artículo te diremos todo lo que debés saber acerca de la narcolepsia. Sin embargo, si presentás alguno de los síntomas, o tenés alguna afección relacionada con el sueño, recordá acudir con un médico para mayor información.

Qué es la narcolepsia

La narcolepsia fue nominada por primera vez a finales del siglo XIX. Su etimología proviene del griego nárko, que significa sopor, y lêpsis, que significa ataque. Es un trastorno neurológico crónico causado por la incapacidad cerebral de regular los ciclos de sueño con normalidad.

Los estudios más recientes sugieren que los pacientes con narcolepsia pueden presentar episodios de sueño repentino durante el día. Pueden durar desde unos segundos a minutos, o en raros casos, hasta más de una hora.

Esta enfermedad suele comenzar a presentarse en la adolescencia o al comienzo de la adultez temprana, y persiste durante toda la vida. Uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las personas que padecen esta enfermedad es la gran falta de información disponible.

Actualmente aún se desconoce la causa exacta de la narcolepsia. Algunas pruebas señalan que puede ser provocada por una reacción autoinmunitaria en un área determinada del cerebro.

Síntomas de la narcolepsia

La narcolepsia describe alteraciones en los mecanismos para regular el sueño REM (Rapid Eye Movement, que significa Movimiento Rápido de Ojos). Esto ocasiona interrupciones de sueño constantes, sueño fragmentado y una clara alteración del ciclo, que produce los conocidos ataques de sueño durante el día.

La mayoría de los pacientes con narcolepsia presentan sólo algunos de los síntomas, mientras que un 10% experimenta todos. Otros de los signos y síntomas de la narcolepsia pueden ser peores durante los primeros años y continuar de por vida. Te los contamos a continuación.

Parálisis de sueño

La parálisis de sueño es lo que sufren las personas que de pronto se despiertan por la noche sin poder mover un solo músculo de su cuerpo. Puede provocar miedo, ya que no se tiene control sobre las sensaciones internas e incluso externas que tiene el cuerpo en ese momento. Puede durar varios minutos.

Aunque no todas las personas que sufren de episodios de parálisis del sueño tienen narcolepsia, las personas con esta enfermedad presentan estos  episodios más a menudo.

Alucinaciones

Son diferentes a las alucinaciones ocasionadas por sustancias psicotrópicas o como resultado de un episodio psicótico. Las alucinaciones producidas por la narcolepsia se conocen como alucinaciones hipnagógicas.

Las alucinaciones hipnagógicas  ocurren cuando estás a punto de quedarte dormido. También es común experimentar alucinaciones hipnopómpicas, que suceden al momento de despertar.

Este tipo de alucinaciones pueden dar una sensación muy real de que hay un extraño en la habitación, ya que, literalmente, consiste en soñar despierto. Pueden ser vívidas y terroríficas, ya que se experimentan los sueños como si sucedieran en la vida real. Esto asusta mucho.

Pérdida de la masa muscular

La cataplejía es uno de los principales síntomas de la narcolepsia, y se estima que afecta al 70% de los pacientes. Provoca cambios físicos en el cuerpo, como pérdida repentina del tono muscular, problemas al hablar y debilidad en la mayoría de los músculos.

La cataplejía puede durar unos cuántos minutos. Es ocasionada por emociones intensas, por lo regular las positivas, como la risa o la euforia. En ocasiones también puede ser provocada por emociones negativas, como la sorpresa, el enojo o el miedo.

Si alguna vez has reído tanto que se te doblan las rodillas, entenderás lo que sienten las personas con este trastorno. Aunque no todas las personas con narcolepsia experimentan episodios de cataplexia, quienes lo padecen pueden tener uno o dos al año, o varias veces al día.

Cambios en el ciclo de sueño REM

El ciclo REM es aquel momento en que nuestro cerebro entra en el estado que nos permite soñar, y regularmente sucede entre 60 a 90 minutos después de quedarnos dormidos. Aquellos con narcolepsia pueden llegar al ciclo REM 15 minutos después de quedarse dormidos, en cualquier momento del día o la noche.

Somnolencia excesiva durante el día

La somnolencia es uno de los síntomas más conocidos de la narcolepsia, pues suelen quedarse dormidas en cualquier momento sin previo aviso. Estos episodios de sueño repentino pueden durar desde varios minutos hasta una hora.

Aunque los ciclos de sueño permiten que el cuerpo descanse, más adelante la persona volverá a estar somnolienta. Es posible experimentar una pérdida de la capacidad de atención y concentración. Al ser el primer síntoma que aparece, es también el que ocasiona más problemas.

Causas de la narcolepsia

Las causas exactas de la narcolepsia aún son desconocidas para los expertos. Lo que complica más las cosas es que, posiblemente, no sea una sola la causa de esta enfermedad. Sin embargo, se ha encontrado que pueden haber factores ambientales y genéticos involucrados. La narcolepsia puede ser hereditaria.

Se ha encontrado en pacientes con narcolepsia un nivel bajo de hipocretina, una sustancia producida por el cerebro para estar despierto. Los bajos niveles de esta sustancia pueden deberse a una reacción autoinmune, que es cuando el cuerpo ataca el tejido sano por error.

De acuerdo con investigaciones recientes, se ha encontrado una posible relación entre la exposición a la gripe porcina o influenza H1N1, y una de sus vacunas. Aunque todavía no está claro este vínculo, se siguen realizando investigaciones para averiguar la causa.

¿Hay factores de riesgo?

Al igual que las causas, definir los factores de riesgo de la narcolepsia es algo que escapa a los expertos investigando esta enfermedad. Actualmente se conocen pocos, entre ellos:

• Edad: Por lo regular, esta enfermedad comienza entre los 10 y los 30 años de edad.

• Antecedentes familiares: Aunque el riesgo de transmitir la narcolepsia por medio de los genes es solo de alrededor de 1%, el riesgo es de 20 a 40 veces mayor si uno de los padres padece narcolepsia.

Cabe mencionar que, en los infantes con esta enfermedad, se corre un mayor riesgo de presentar problemas de conducta. Además, si no se hace una diagnóstico a tiempo puede ocasionar problemas como:

• Síndrome de hiperactividad y déficit de atención.

• Interferir en el desarrollo psicológico y cognitivo.

• Obstaculizar seriamente el desarrollo social.

¿Afecta a los órganos?

Como en cualquier otro trastorno del sueño, existen afectaciones a los órganos por un ciclo alterado del sueño. Se ha encontrado que 40% de los pacientes con Alzheimer tienen un trastorno de alteración del sueño.

A nivel psicológico, hay una fuerte relación entre el rendimiento cognitivo y los ciclos regulares del sueño. No dormir de forma correcta puede derivar en problemas de concentración, de memoria, fatiga durante el día y reduce la capacidad de atención.

Las afectaciones en el organismo pueden variar en intensidad, pero comúnmente se presentan tras un período prolongado de tiempo en que la persona no duerme correctamente. Incluso, bastan 6 días de ciclos de sueño de 4 horas para reducir la curva de tolerancia a la glucosa y producir hiperglucemia.

Se calcula que 38%-45% de los pacientes con Diabetes Tipo 2 presentan algún trastorno de sueño. También, las personas que duermen menos de 6 horas diariamente corren dos veces mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad.

A nivel cardíaco, aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares debido a la reducción en la temperatura basal, factor que determina un buen ritmo cardíaco.

En el largo término, las consecuencias de un ciclo de sueño regular desencadenan trastornos gastrointestinales y del sistema inmune. Las personas con trastornos de sueño corren un riesgo más alto de tener accidentes cerebro-vasculares, hipertensión, envejecer de manera precoz y sentir dolores corporales frecuentes.

¿Hay cura?

Es importante mencionar que la narcolepsia es un trastorno crónico. Es decir, de por vida, por lo que no hay una cura. Sin embargo se han desarrollado tratamientos para controlar los síntomas de la narcolepsia, condicionando la vida del paciente en la dimensión laboral, social o académica.

A cada paciente corresponde un tratamiento específico, ya que se toma en cuenta la gravedad, el orden en el que van apareciendo los síntomas y el desarrollo de la enfermedad. Con un tratamiento adecuado dado por el médico, la narcolepsia es controlable.

A continuación te diremos algunos de los tratamientos más utilizados para el control de la narcolepsia. Pero, si vos o alguien que conocés presenta alguno de los síntomas, no podemos dejar de sugerir que acudas primero con un profesional especializado para una mayor y mejor orientación.

• Estimulantes del sistema nervioso central: Este es uno de los principales tratamientos para la somnolencia diurna. Estos fármacos favorecen el incremento de noradrenalina y dopamina, que disminuyen el hambre, el sueño y la fatiga. Pero puede tener considerables efectos adversos, como irritabilidad, ansiedad, anorexia y alteraciones cardiovasculares.

• Oxibato sódico: Este es un tratamiento que se ha desarrollado en los últimos años para el tratamiento de la cataplejía. A diferencia de los antidepresivos, ha demostrado resultados sustanciales contra este síntoma que puede poner en riesgo la vida del paciente. Tiene efectos adversos menos relevantes, pero frecuentes, como náuseas y vómitos, enuresis y cefalea.

• Tratamiento conductual: Se recomienda que se acompañe un tratamiento farmacológico con un psicoterapeuta. Puede recomendar cambios en el estilo de vida que ayuden a controlar los síntomas y a enfrentar los efectos de esta enfermedad en los ámbitos laboral, social y académico.

Otros trastornos del sueño

Los trastornos del sueño son varios. Entre los que suelen presentarse más comúnmente se encuentran el insomnio, la apnea del sueño y el síndrome de las piernas inquietas.

Te contamos en un pequeño resumen un poco más de cada uno:

Insomnio

Este trastorno causa mucha dificultad para quedarse dormido o incluso para mantener el sueño. Las personas suelen sentirse aún muy cansadas después de despertar afectando esto las energías y sobre todo el estado de ánimo de quien lo padece. También puede afectar la capacidad para concentrarse en las tareas laborales o cotidianas como, por ejemplo, manejar.

Apnea del sueño

Esto se manifiesta cuándo la respiración se detiene y vuelve a comenzar durante repetidas veces. Entre los síntomas más comunes de este padecimiento podemos mencionar jadeos al respirar, despertar con la boca seca, tener dolores de cabeza matutinos, irritabilidad. El más repetido entre los pacientes es sufrir de ronquidos fuertes que llegan a despertarlos.

Síndrome de las piernas inquietas

Se explica como una necesidad de mover las piernas que no se puede controlar. Provoca una continúa sensación de incomodidad, que se apacigua inmediatamente después de hacerlo. 

Conclusión

La narcolepsia es una enfermedad crónica que afecta los ciclos de vigilia-sueño, y que se caracteriza por episodios repentinos de sueño. Uno de los mayores retos a los que se enfrentan sus pacientes es la falta de información al respecto y las dificultades del diagnóstico.

Generalmente, los síntomas se presentan durante el día, y puede ser altamente discapacitante para quien lo padece. Esta enfermedad puede presentarse ya sea en la infancia o en la adultez, y es importante acudir a un especialista del sueño en caso de presentar uno o varios de los síntomas.

Aunque actualmente no existe una cura definitiva para la narcolepsia, existen varios tratamientos que pueden ayudar a controlar los síntomas. Los tratamientos deben ser individualizados, observados regularmente con un médico y cautelosamente recetados.

Son necesarios mayores estudios que contribuyan a un mayor entendimiento de la complejidad de esta enfermedad. Esto permitirá el desarrollo de un tratamiento más adecuado para cada paciente.

Para más contenido acerca de enfermedades del sueño y salud, seguí leyendo El Destape.