Pie diabético, la peligrosa afección que afecta a casi un 25% de pacientes según la UBA

Se estima que 4 de cada 10 personas con diabetes no saben que padecen la enfermedad en Argentina. Qué problemas puede traer la afección en los pies.

01 de agosto, 2024 | 10.22

El pie diabético es una afección que se presenta en pacientes con diabetes mal controlada y que puede llevar a la pérdida de sensibilidad en los miembros inferiores, alteraciones en la circulación sanguínea y a la formación de heridas que no cicatrizan adecuadamente. Se trata de una complicación grave y potencialmente incapacitante que afecta a millones de personas en el mundo. "Se estima que el 85% de las amputaciones a nivel mundial son por esta patología", señalaron desde la Universidad de Buenos Aires (UBA).

"La posibilidad de que una persona con diabetes presente una lesión en sus miembros inferiores es del 15 al 25% a lo largo de toda su vida. La recurrencia de la misma es del 50 al 70% dentro de los 5 años”, alertó Daniel Braver, coordinador del equipo de Pie Diabético del Hospital de Clínicas. Y agrega: “En su etapa inicial, puede no presentar síntomas claros y se suele detectar una vez que existe una herida importante en una de las piernas. Esta complicación afecta tanto a hombres como a mujeres y se extiende en las distintas edades de la vida de las personas con esta patología. Sin embargo, es más común en pacientes de edad avanzada debido a la progresión de la enfermedad y a la presencia de otras condiciones de salud asociadas”.

En Argentina, se estima que 4 de cada 10 personas con diabetes no saben que padecen dicha enfermedad. En la mayoría de los casos, se debe a la ausencia de síntomas evidentes en las etapas iniciales. Si el pie diabético no es diagnosticado a tiempo y de manera adecuada, puede desencadenar complicaciones graves como úlceras, deformaciones y amputaciones. Su grado de prevalencia es significativo, siendo una de las complicaciones más comunes y graves de la diabetes.

Existen dos tipos principales de pie diabéticos: la neuropatía y la enfermedad vascular periférica. La primera de ellas es una complicación de la diabetes descompensada que resulta en la pérdida de sensibilidad en los pies, lo que puede conducir a lesiones indoloras y, en casos graves, a úlceras que no cicatrizan adecuadamente. La neuropatía es la desencadenante de las lesiones puesto que el paciente presenta falta de sensibilidad en los miembros inferiores. Por su parte, la vascular periférica está asociada -además de la diabetes- a la obesidad, la hipertensión arterial y otros factores de riesgo; afectando a las arterias de los miembros inferiores, dificultado la cicatrización de heridas y aumentando el riesgo de amputación.

“Las guías que presentaremos en nuestro congreso este año son las del International Working Group of Diabetic Foot, fundamentales en la prevención, diagnóstico y tratamiento del pie diabético. Están orientadas a profesionales de la salud como médicos clínicos, endocrinólogos, infectólogos, cirujanos vasculares, ortopedistas, podólogos y enfermeros para brindarles herramientas para detectar de forma precoz esta peligrosa afección pudiendo derivar en forma rápida la patología y así evitar complicaciones mayores como infecciones o amputaciones”, sostiene el profesional en relación al próximo XIX Congreso Internacional de Medicina Interna 2024, organizado por el Clínicas de la UBA. Estas guías, que se presentarán buscan unificar conceptos a nivel mundial y promover la prevención y el manejo efectivo del pie diabético en diferentes contextos de salud. Serán presentadas en el XIX Congreso Internacional de Medicina Interna 2024.

Asimismo, desde el establecimiento señalan que poseen un Grupo especializado en Pie Diabético, conformado por especialistas como un coordinador, diabetólogo, infectólogo, enfermeras, podólogos, traumatólogos y cirujanos vasculares. “Los profesionales enfrentan el desafío de concientizar sobre el pie diabético y realizar campañas de prevención tanto en la comunidad médica como en la población en general. La educación y el control riguroso de los factores de riesgo son clave para reducir las complicaciones asociadas” concluye el especialista. 

¿Cómo puedo proteger mis pies si tengo diabetes?

  • Revisarse los pies todos los días. Busque cortes, enrojecimiento y otros cambios en la piel y las uñas de los pies, incluyendo verrugas u otras manchas que sus zapatos podrían frotar. Asegúrese de revisar también la planta de los pies.
     
  • Lavarse los pies todos los días. Use agua tibia y jabón. No remoje sus pies porque eso puede resecar la piel. Después de secarse los pies, puede usar talco o almidón de maíz entre los dedos para absorber la humedad que puede causar infecciones. Si usa loción humectante, no la aplique entre los dedos de los pies.
     
  • Preguntarle a su médico cómo eliminar callos y callosidades de forma segura. La piel gruesa de sus pies puede causar fricción y provocar llagas. Pero quitarlos de manera incorrecta podría dañar su piel. Por lo tanto, no se recomienda limarse la piel ni usar parches medicinales o removedores líquidos.
     
  • Cortar las uñas de los pies en línea recta con un cortauñas. Si le resulta difícil cortarse las uñas de los pies, o si son gruesas o se curvan en la piel, pídale a un podólogo (especialista de los pies) que lo haga por usted.
     
  • Siempre use zapatos que le queden bien y calcetines o pantuflas para proteger sus pies al caminar. No se recomienda caminar descalzo, ni siquiera en interiores. Y asegúrese de que sus zapatos sean suaves por dentro. Una costura o un guijarro podrían frotar su piel y dañarla.
     
  • Proteger sus pies del calor y el frío. Use protector solar en la piel expuesta y no camine descalzo en la playa. En clima frío, use calcetines gruesos en lugar de calentar sus pies cerca de un calentador o chimenea.
     
  • Mantener la sangre fluyendo por sus pies. Levante los pies cuando esté sentado. Mueva los dedos de los pies y haga círculos con los pies a lo largo del día. No use calcetines ajustados. Y realice muchas actividades que no sean demasiado duras para los pies, como caminar.
     
  • Hacer que le revisen los pies en sus visitas médicas: Incluso si no ha notado ningún problema, es bueno que su profesional de la salud le revise los pies.