De acuerdo a un estudio del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS), al menos el 65 por ciento de la población tiene en cuenta las medidas de prevención para evitar accidentes por inhalación de monóxido de carbono. No obstante, es importante recordar los síntomas que este gas sin olor puede causar y cómo prevenirlos.
Qué es el monóxido de carbono
El monóxido de carbono es el resultante de la combustión deficiente de una fuente energética, como puede ser el gas natural. Es una sustancia que carece de olor, color y sabor y es altamente tóxica. Cuando la cantidad de oxígeno es insuficiente, la combustión es incompleta y se produce monóxido de carbono. El monóxido de carbono ingresa al cuerpo a través de la respiración; y puede provocar dolor de cabeza, náuseas, vómitos, desmayos e incluso la muerte.
Para evitarlo, las empresas de gas, como Naturgy, brindaron las siguientes recomendaciones
En las instalaciones
- · Revisar periódicamente el estado de las instalaciones internas de gas del hogar por medio de un gasista matriculado.
- · No instalar calefones, estufas infrarrojas, catalíticas o de llama abierta, en baños, dormitorios o ambientes cerrados. Solo deben colocarse artefactos de tiro balanceado.
- · Todas las instalaciones de gas, la colocación de artefactos y su reparación deben ser efectuadas por gasistas matriculados.
- · No obstruir las rejillas de ventilación e ingreso de aire.
- · Verificar el buen funcionamiento de los tirajes o conductos de ventilación, de modo que no estén obstruidos, estrangulados, fisurados desconectados o abollados.
- · No realizar combinaciones ni conexiones de conductos de ventilación de dos artefactos diferentes (calefones y campanas extractoras). Cada conducto de ventilación debe ser individual.
Durante el uso
- · Controlar que la llama del quemador de los artefactos (ponga especial énfasis en el calefón) sea de color azul y de geometría uniforme, si fuese amarilla significa que está produciendo Monóxido de Carbono. En este caso, apagar el artefacto y hacer revisar el quemador por un gasista matriculado.
- · No utilizar artefactos de calefacción para secar prendas.
- · No usar hornos para calefaccionar los ambientes.
- · Verificar el cierre correcto de las canillas de agua caliente, especialmente durante la noche, para evitar el funcionamiento continuo de calefones.
- · Utilizar artefactos aprobados por el ENARGAS.
- · Evitar la sobreocupación de ambientes con artefactos de calefacción.
- · En caso de que alguna persona esté bajo los efectos del monóxido de carbono deberá ser rápidamente retirada del lugar para que aspire aire fresco y deberá ser atendida por un médico.
- · Periódicamente ventilar los ambientes.